Crisis en el PSOE

Valenciano y Madina se reunieron el martes para planear el «paso adelante»

La estrategia era construirle «una imagen como representante de las bases»

Cuatro días después de las elecciones europeas y tras anunciar su retirada, Alfredo Pérez Rubalcaba reapareció ayer en el Congreso de los Diputados, donde departió largo y tendido con Soraya Rodríguez.
Cuatro días después de las elecciones europeas y tras anunciar su retirada, Alfredo Pérez Rubalcaba reapareció ayer en el Congreso de los Diputados, donde departió largo y tendido con Soraya Rodríguez.larazon

Los trileros juegan al ratón y al gato con la Policía en las Ramblas barcelonesas. Se acercan a los turistas y empiezan a jugar. ¿Dónde está la bolita? Sus compinches empiezan a apostar mientras el trilero engatusa a los curiosos que se paran a mirar. Al final, algunos pican el anzuelo. Juegan y pierden. Pierden siempre. Sólo ganan la primera vez. Es la treta para que siga apostando. Y para que siga perdiendo. Sin embargo, uno de los apostantes se da cuenta del engaño. Denuncia al trilero y lo pone en evidencia. El acusado se defiende a voz en grito. Se declara víctima de una insidia y jura, por su honor, que él sólo mueve los cubiletes. Acertar dónde está la bola, o no, es cuestión de suerte.

Domingo noche

La sede del PSOE era todo un velatorio. Un periodista radiofónico empezaba su crónica «se han visto entierros más animados que la noche de hoy en la calle Ferraz». En las plantas nobles, la cuarta y la quinta las caras explicaban todo. El resultado electoral era todo un fracaso. Rubalcaba está rodeado de su núcleo duro. Realizó varias llamadas. Una de ellas a Andalucía, a la secretaria general de los socialistas andaluces, Susana Díaz. Ella había tenido un buen resultado. Los conminó a convocar un congreso extraordinario y acelerar el relevo. Felipe González le aconsejó que hiciera caso de la líder andaluza.

Lunes mañana

La comisión ejecutiva se reúne. Rubalcaba comunica que deja el cargo y anuncia la convocatoria de un congreso extraordinario. Sin embargo, no dimite. No deja el cargo y sigue pilotando la sucesión. De hecho, algunos de los miembros de la ejecutiva se sorprendieron. «Pensaron que había dimitido. Se dieron cuenta cuando vieron que no convocaba el Comité Federal para elegir una gestora. Eso hubiera sido lo lógico», apunta un senador. La ejecutiva se irá pero todavía se queda. «Rubalcaba ha dimitido un poquito», dice jocoso un diputado que critica que «tenga la desfachatez de no convocar el Comité Federal. Tanto hablar de respeto a los estatutos y los incumple». Nadie de la ejecutiva pone sobre la mesa la propuesta de elegir al secretario general por el voto directo de los militantes. Ni Rubalcaba ni Madina. Dimite Patxi López, que también convoca congreso extraordinario de los socialistas vascos. Chacón se reafirma en primarias abiertas y numerosos dirigentes del partido opinan sobre la situación política. Muchas de estas opiniones apuntan a Susana Díaz como nueva secretaria general. Incluida, Soraya Rodríguez, portavoz parlamentaria.

Lunes tarde/noche

Eduardo Madina se reúne con el expresidente Zapatero. En casa de este último de forma discreta intercambian impresiones sobre la situación. Según fuentes conocedoras del encuentro Madina trasladó a Zapatero sus dudas «porque el escenario ha cambiado mucho» y se ratificó en la necesidad de unas primarias abiertas. Madina no pronuncia ni una sola palabra sobre la posibilidad de elegir el secretario general por sufragio directo de los militantes.

Martes

Sigue la polémica. Durante todo el día se suceden pronunciamientos de dirigentes socialistas. Felipe González respalda las decisiones de Rubalcaba. El malestar es evidente en numerosos dirigentes políticos. «Yo no hablo con el secretario general desde las elecciones. A mí no me ha llamado en ningún momento», apunta un responsable territorial del PSOE que no ve con buenos ojos lo que está pasando. «Estamos siendo torpes. Muy torpes. Hace tiempo que Rubalcaba debía abandonar la dirección y ahora que lo hace nos mete en un follón». Un diputado socialista dice en esta línea «lo que está pasando es el colmo de la improvisación».

Martes tarde

Elena Valenciano tiene una discreta reunión con Eduardo Madina. Se supone que con el beneplácito del secretario general. Llevan trabajando juntos desde hace un año. De hecho, varios miembros del equipo de Valenciano son parte del núcleo de colaboradores de Madina. En esta reunión, Valenciano le plantea a Madina la propuesta: hagamos un congreso abierto. Que los militantes elijan al secretario general. De esta forma, las primarias abiertas a los ciudadanos se convierten en primarias cerradas a la sociedad. Su decisión final se traslada a Rubalcaba y se dibuja la estrategia «se debe construir una imagen para Madina en la que aparezca como representante de las bases que ablande al rocoso y reticente Rubalcaba, celoso de la tradición estatutaria», apunta un conocedor de estos encuentros.

Miércoles mañana

«El País» publica que «un movimiento transversal» apuesta por la elección directa del secretario general. Cesar Calderón, estrecho colaborador de Elena Valenciano y responsable de redes sociales cambia a primera hora de la mañana su hashtag. Pasa de «primariasabiertas» a «unmilitanteunvoto». Sobre las 09:30, Madina anuncia su disponibilidad a presentarse si los militantes votan al secretario general. De forma inmediata, la dirección del PSOE valora positivamente la propuesta y acuerda estudiarla. Apenas tres horas después, Rubalcaba cede a la petición de Madina. Entre medias, Soraya Rodríguez apoya la propuesta. Ninguno la había planteado 48 horas antes, en la reunión de la comisión ejecutiva del PSOE. Susana Díaz se entera de la propuesta por los medios de comunicación. En el PSOE nadie cree que Madina haya tomado la decisión de forma unilateral. Se apunta que cuenta con el apoyo de Felipe, Rubalcaba y Chaves porque «sería la primera vez que se arriesgara».

Jueves mañana

Crece el malestar y arrecían las críticas. Rubalcaba ofrece una rueda de prensa en la que se presenta como víctima. Afirma que los rumores son consecuencia de que tiene «capacidad limitada» y afirma que es compatible «ser presidenta de Andalucía y líder del PSOE». En los cenáculos socialistas, la pregunta ¿Cuál es la contrapartida que pide Rubalcaba? Al finalizar su rueda de prensa el secretario general saliente apunta «que no quiere ser un jubilado de la política» aunque «no estará en primera línea». Muchos señalan «¿quiere la presidencia?» Madina pone tierra de por medio anunciando que no definirá su posición hasta el próximo lunes. Chacón se reafirma en su propuesta de primarias abiertas. No varía un ápice su posición.

Jueves tarde

Madrid, Valencia, Canarias, Aragón, Extremadura, La Rioja muestran su apoyo públicamente a Susana Díaz. Hoy viernes, Rubalcaba recibirá el mismo mensaje de los socialistas catalanes. Pere Navarro así se lo comunicará cuando coincidan en la reunión anual del Círculo de Economía en Sitges. Sumando todos, ya son demasiados. «Si no queremos fracasar el secretario general debe tener el apoyo de al menos el 90% del partido» afirma un secretario general de una federación socialista. Al trilero le han descubierto la bolita.