Respuesta del grupo

Mägo de Oz, tras el veto del PSOE y la cancelación de su concierto: "No vamos a permitir chantajes ni lecciones de moralidad"

El grupo defiende su derecho a la sátira y acusa al Ayuntamiento de Vilagarcía de censura tras quedar fuera del cartel de las fiestas locales

GALICIA.-Vilagarcía cancelará el concierto de Mägo de Oz si no rectifica sus "frivolizaciones" sobre las drogas y la prostitución
GALICIA.-Vilagarcía cancela el concierto de Mägo de Oz Europa Press

La banda española de folk-metal Mägo de Oz ha reaccionado con contundencia tras la cancelación de su concierto programado para el 19 de agosto en Vilagarcía de Arousa (Pontevedra). El Ayuntamiento, gobernado por PSOE y BNG, decidió suprimir el concierto al considerar ofensivas unas declaraciones realizadas por el guitarrista Víctor de Andrés en un concierto en Asturias, en las que hizo bromas sobre la prostitución, las drogas y lanzó insultos contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Según el comunicado oficial del grupo, la decisión del consistorio supone un intento de censura y una exigencia de lecciones morales. Mägo de Oz sostiene que sus comentarios estaban en clave de sátira política y social, no con ánimo de ofender, y subraya que sus letras defienden valores progresistas, la diversidad y los derechos humanos. Aseguran que no responderán a “chantajes institucionales”.

Para el Ayuntamiento, la suspensión no respondió a motivaciones políticas sino al rechazo a “frivolizar” con temas sensibles como la prostitución y el narcotráfico. El gobierno local había exigido previamente una rectificación pública al grupo, que finalmente no se produjo, por lo que decidieron cancelar el contrato. En lugar de Mägo de Oz, actuará Los Toreros Muertos junto a artistas como Mondra, Ainhoa Arteta y David Bustamante.

La polémica se agrava en redes sociales, donde ambos bandos mantienen posiciones enfrentadas. Mägo de Oz defiende que invita al uso de la música como vehículo de expresión libre, apelando a la tolerancia, la educación y el juicio crítico. Por su parte, el fiasco ha abierto un debate sobre los límites del humor político en el contexto de las fiestas locales, y sobre cómo los gobiernos municipales gestionan la cultura frente a la libertad de expresión.