La regla 5-6-7 para cocinar hamburguesas y que queden en su punto: jugosas pero cocinadas

Cocinar la hamburguesa perfecta no es solo cuestión de ingredientes, sino también de técnica. Si le preguntas a los mejores chefs, te dirán que lo más importante es el punto de la carne. Una de las reglas más efectivas para lograr una carne jugosa, bien cocida y llena de sabor es la llamada regla 5-6-7.

Esta técnica se basa en tiempos de cocción precisos y en la importancia del reposo. Si sigues este método al pie de la letra, podrás disfrutar de hamburguesas en su punto.

¿En qué consiste la regla 5-6-7?

1. Cocina la hamburguesa a fuego medio durante 5 minutos de un lado.

2. Dale la vuelta y cocínala 6 minutosdel otro lado.

3. Retírala del fuego y déjala reposar 7 minutos antes de servirla.

Este proceso es ideal para hamburguesas de aproximadamente 1.25 cm de grosor, ya que permite una cocción uniforme sin perder el jugo de la propia carne. Además, evita que la carne se sobrecocine o se vuelva seca, un error común al preparar hamburguesas.

¿Por qué funciona este método?

El éxito de esta regla radica en la combinación de calor moderado y tiempos de cocción bien equilibrados. Cocinar a fuego medio permite que el calor penetre lentamente en la carne, asegurando que el interior se cocine sin que el exterior se queme antes de tiempo.

Al respetar los tiempos de cocción de cinco y seis minutos por cada lado, se logra un dorado uniforme y una textura perfecta en el interior. Finalmente, el reposo de siete minutos es fundamental para mantener la jugosidad de la carne, ya que durante este tiempo los jugos que se han concentrado en el centro de la hamburguesa se redistribuyen, evitando que se escapen al cortarla o morderla.

¿Se puede aplicar en cualquier método de cocción?

La regla 5-6-7 funciona mejor en parrillas con tapa cerrada, ya que el calor circula de manera uniforme alrededor de la carne. Sin embargo, si cocinas en una sartén, podrías hacer un pequeño ajuste para compensar la diferencia en la distribución del calor. En una sartén de hierro fundido, debido a que el calor se retiene de manera diferente, puedes probar una variación 4-5-6, es decir, cuatro minutos de un lado, cinco del otro y seis de reposo para evitar que la carne se cocine de más.

En una parrilla sin tapa, la exposición directa al calor puede acelerar la cocción, por lo que es recomendable reducir ligeramente los tiempos y vigilar el proceso. Para hamburguesas más gruesas, si la carne supera los 1.5 cm de grosor, puedes extender los tiempos de cocción en un par de minutos para asegurar que el interior alcance el punto deseado.

Consejos adicionales para una hamburguesa perfecta

No presiones la hamburguesa con la espátula, ya que esto solo hará que los jugos se escapen, dejando la carne seca y sin sabor. Usar carne de buena calidad es fundamental y precalentar bien la parrilla o la sartén ayuda a sellar la carne rápidamente.