Del linchamiento a la rubia gallega del hotel de Kiko Rivera a la frase imperdonable contra Rocío Monasterio

Sandra, que vive en Suiza y es de Padrón, ha hablado para el programa de Ana Rosa, donde ha hecho unas declaraciones a Pepe del Real, el periodista que se está tomando muy en serio la defensa de la parte más débil y está demostrando ser muy valiente. Sandra se tomó, me cuentan fuentes bien informadas, cinco chupitos de tequila mezclados con otra bebida, y eso no hay quien lo resista…

Nadie se está haciendo eco de un asunto que podría poner boca abajo los cimientos de las revistas del corazón. Nos estamos quedando sin personajes, y a algunos hay que protegerlos. Dios me libre de decir que Kiko ha cometido infidelidad alguna. Ni lo digo ni lo insinúo. Ha amenazado con poner una querella de tamaño catedralicio contra aquel que se poner en duda el amor que siente contra su mujer, y líbrenme de ponerlo en duda, la quiere la ama, la idolatra, la venera….

Y ahora cambiemos de tema. Y no estoy hablando de Kiko, sino en general. Lo que hay que hacer cuando una persona está en evidente estado de embriaguez es preocuparse por su seguridad, ni más ni menos, y evitar situaciones complicadas, que no está el horno para bollos. Si es cierto lo que dice Sandra habría que haber evitado que entrara en el hotel en el estado en el que entró. Según manifestó en el programa de Ana Rosa, el de Seguridad se la entregó a su marido, tirándola y diciéndole: “Ahí la tienes”. En Padrón todo el mundo sabe que hasta la policía municipal se personó en el hotel.

Es muy fuerte lo que dijo en su entrevista, cuando defendía a su ex marido, Roberto, al que avisaron para que se presentara en el hotel a buscarla: “Gracias a él yo puede dormir en mi cama”. Según ha relatado en el programa de Ana Rosa se montó en una furgoneta sin saber a donde iba. Después de que Kiko les hicieran subir a ella y a dos amigas al escenario de la discoteca donde actuaban en Padrón. Su prima la llamo cuando estaba en la furgoneta, ha contado en el programa, le preguntó a dónde iba, y ella le contestó , “no sé a dónde me están llevando”. Sólo dice que no se acuerda de nada, no sabe si estuvo con Kiko o con el amigo, y la pobre tiene que defenderse diciendo “que nunca habló de una infidelidad”.

Irene Rosales se la ve muy convencida en el papel que está interpretando, a lo Hillary Clinton, y Sandra la acusa de estar dejando en muy mal lugar a las mujeres..

Sandra anunció que iba a poner varias demandas, y también Irene Rosales, y puede haber sorpresas. La historia no ha terminado. Alessandro Lequio se pasó cien pueblos descalificando a la rubia gallega. Él forma o ha formado parte de los personajes a los que se ha protegido contra viento y marea en los medios. Tuvo un hada madrina muy bondadosa llamada Ana Obregón que siempre dio la cara por él. Más vale que esté calladito, a ver si a alguien le da por tirar de hemeroteca.

Ni siquiera canta, como cantaba Chiquetete, a quien las acusaciones de Raquel Bollo convirtieron en un personaje non grato en las cadenas. Kiko Rivera es su resobrino, y tanto su madre como él siempre le dieron la espalda, a pesar de ser familia y de lo mucho que hizo por su prima el cantante de “Esa Cobardía”. Tenía sentencia firme por un juicio de faltas. El hijo de su prima está limpio, de momento, de polvo y paja.

La imagen de Sandra, una esteticienne que vive en Suiza y trabaja 14 horas diarias, la han ensuciado, no se puede decir de una persona anónima “que tiene un pasado”.

Más grave es la frase que pronunció ayer un colaborador del programa de Risto Mejide, Antonio Castelo, en relación con Rocío Monasterio, cuando el viernes pasado, sin ningún reparo, dijo “que se quita las bragas a pedos”, tras la emisón de un vídeo en el que le preguntan por el escándalo inmobiliario relacionado con Arturo Valls. ¿Que hubiera ocurrido si la frase hubiera estado dirigida hacia otra mujer ? Y es que hay machismos más o menos permitidos y comportamientos imperdonables según de quien vengan. Llueve sobre mojado. En el mismo programa Monedero ha cargado contra Mariló Montero y ha dicho que tiene muy pocas luces. ¿No se acuerda de que Pablo Iglesias dijo en un chat no hace tanto tiempo que la azotaría hasta que sangra, como si hablara de un perro? No se trata a las mujeres como a perros, sean autoras de presuntos delitos, sean bebedoras de tequila o presentadoras de televisión.