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El chollo de Isa P: 1.000 euros por subir una foto y otros mil por cada minuto de actuación

La hija de Isabel Pantoja se está haciendo de oro con la promoción de marcas en internet y los “bolos” que realiza con su única canción, “Ahora estoy mejor”.

Isa P durante una actuación en la discoteca Kapital / Foto: Jesús G. Feria
Isa P durante una actuación en la discoteca Kapital / Foto: Jesús G. Ferialarazon

La hija de Isabel Pantoja se está haciendo de oro con la promoción de marcas en internet y los “bolos” que realiza con su única canción, “Ahora estoy mejor”.

Les llaman las “pantojitas” por ser las miembros más mediáticas del clan encabezado por Isabel Pantoja. Isa y Anabel, ahora tan distanciadas por desencuentros familiares derivados de la enfermedad de la matriarca doña Ana, están unidas por el chollo que han sabido encontrar en las redes sociales, a las que le sacan un partido económico que ya quisieran muchos “ influencers”.

Y es que la polémica hija y la sobrinísima de la tonadillera se están convirtiendo en un filón a la hora de colgar fotografías en las que “promocionan” todo tipo de artículos, desde gafas a ropa diversa o productos de belleza.

Isa P, como se la conoce en el mundo artístico musical, podría estar cobrando mil euros por cada pieza que cuelga en Internet, y unos tres mil por sus bolos en discotecas de la geografía española, por tan solo cantar tres minutos y medio el único tema de su repertorio, “Ahora estoy mejor”, a razón de casi mil el minuto, una cantidad al alcance de muy pocos.

Aunque “reniega” del apellido Pantoja en su rol como cantante, buen rendimiento está obteniendo por ser “hija de...”, a pesar de que su madre le ha puesto una “cruz” por su feo comportamiento con la abuela Ana.

En cuanto a Anabel, su caché estaría por encima del de su prima, a razón de dos mil euros por foto. Y eso que no hace mucho, a finales de agosto, recibió un montón de críticas durante un viaje a Cuba, por colgar imágenes en su Instagram regalando gafas y productos de belleza, exactamente unos pintalabios, a niñas de uno de los barrios más humildes de La Habana, “etiquetando” dichos artículos para promocionarlos. El tiro le salió por la culata y lo que ella pretendía que fuera “una labor social” se convirtió en un polémico debate y en múltiples reproches e insultos.

El escándalo iba en aumento y Anabel llegó a pedir perdón públicamente por su acción, aunque recalcó que “me acusan de querer comercializar con menores de por medio y nunca haría nada que hiciera daño a un menor, adoro a los niños... No era mi intención, tuve una torpeza y luego recapacité... Pero las marcas no tienen nada que ver con este asunto ni yo he cobrado de ellas”. Y prometió que un incidente como ese “no volverá a ocurrir jamás”.

Fue su primo, Kiko Rivera, quien se puso en contacto con ella para advertirle del “peligro” que conllevan ese tipo de acciones como la originada por la “pantojita chica” en la isla caribeña.

En lo que se refiere a Isa P, mientras su cuenta corriente se incrementa gracias a sus “logros” profesionales, su vida familiar va tan en declive que hasta su madre ha confesado a sus íntimos que está harta de su hija adoptiva. Ni se le quiere en “Cantora” ni se le espera, no sería bien recibida.

Incluso Luis Rollán, uno de los mejores amigos de Isabel Pantoja, arremetía contra la antaño Chabelita desde un programa de televisión dominical: “Si esa chica trata así a su abuela y a su madre, imagínate al resto. A mí, Isa no me da pena, no me sorprende nada de ella”. Muchos opinan que “la reina de hielo”, como se califica a la otra “pantojita”, porque utiliza esa frase en su canción, tiene bien merecido tan frío apodo.