Cuando olvidas que eres una estrella

Carmen Sevilla vive anclada en el olvido por culpa del alzhéimer; no sabe lo que ocurre a su alrededor.

Carmen Sevilla vive anclada en el olvido por culpa del alzhéimer; no se entera de lo que ocurre a su alrededor y, por tanto, no sabe que el Tribunal Supremo ha declarado ilegales las viviendas de las propiedades ubicadas en el complejo «Banana Beach» de Marbella, por lo que serán demolidas. Entre ellas, se encuentra un amplio ático propiedad de la veterana artista, el más espectacular de todo el complejo. Cruza el techo de toda la planta del edificio y posee una terraza que es incluso mayor que la vivienda. En esa propiedad ha pasado Carmen algunos de sus mejores veranos. Pero el alzhéimer ha hecho mella en su cerebro y en su vida. El tratamiento, supervisado por el doctor Ventura Anciones, prestigioso neurólogo que trabaja en las madrileñas clínicas de La Zarzuela y de Nuestra Señora del Rosario, intenta controlar lo mejor posible una enfermedad terrible y cruel que pasa factura a los que la padecen.

Cuando paseas por delante del edificio donde reside Carmen, en el madrileño barrio de Argüelles, solamente tienes que elevar la mirada hacia el primer piso. En uno de sus amplios ventanales se vislumbra una figura, la suya, que se pasa el día sentada en un confortable sillón. Apenas se mueve. La vista fija hacia el parque que alberga el templo de Debod, por el que la actriz y presentadora ya no pasea cada tarde como antaño. Su existencia se resume en una rutina entre cuatro paredes, la compañía de las dos personas que la cuidan, la de su hijo, sus nietos y la de los amigos íntimos que acuden a visitarla.

Carmen no reconoce a nadie. Eso nos revela Miguel Sahagún, uno de los vecinos del barrio, que la admira desde siempre y se lamenta de esta pérdida de memoria tan injusta: «Antes la veíamos pasear por la calle, siempre con la cara sonriente, pero hace tiempo que no me cruzo con ella. No quiero pensar que esté peor porque sería una verdadera desgracia. Es una mujer extraordinaria, que se paraba a hablar con todo el mundo». Una de sus grandes amigas, Marili Coll, estuvo con ella hace semana y media: «La visité por última vez a principios de junio, y al verme no me reconoció. Antes íbamos a pasear por el parque que está frente a su casa, pero ahora ya no tiene ganas de salir ni de nada». Según relata Coll, tiene que recordarle a Carmen Sevilla quién es cuando la visita. «Le cuento anécdotas que vivimos juntas, incluso que le confeccionaba los trajes que se ponía en ''Cine de barrio''. Entonces, parece recordarlo todo, pero en cuanto me voy, pregunta a Angelines, una de las señoras que la cuida, que quién es esa mujer que ha estado charlando con ella hace un rato. Carmen está muy bien cuidada, tiene dos chicas en casa, y su hijo y sus nietos van mucho a verla», asegura. Por su estado de salud, ni siquiera es consciente de que quieren derribar su ático marbellí, en el que atesora tantos recurdos. «No creo que sepa nada de eso. A todos los que la queremos nos gustaría celebrar con ella el día del Carmen el 16 de julio, pero ya no organizó su fiesta de cumpleaños en octubre del 2012 y no creo que esté la pobre para celebraciones ahora». A pesar de todo, sus íntimos siguen visitando con frecuencia a la actriz, entre ellos, Moncho Ferrer, Enrique Miguel Rodríguez, Gonzalo Presa, Rubén Domínguez, Marili y María Rosa, «los incondicionales de siempre. Más que amigos, miembros de su familia», asegura Coll.

A Carmen le diagnosticaron su enfermedad a finales del 2009, cuando todavía presentaba «Cine de barrio», programa que supuso su última aparición televisiva, y del que se despidió el 14 de diciembre del 2010, siendo sustituida por Concha Velasco. En cuanto a la decisión del Tribunal Supremo mencionada más arriba, el concejal de Urbanismo de Marbella, Pablo Moro, comentó hace unos días que no entiende que un edificio así pueda demolerse y apunta que sería una barbaridad tirar este complejo en el que viven 300 familias: «Nosotros en su día quisimos incluir la edificación en el PGOU, pero la Junta se negó. En caso de hipotética demolición, tendrá que ser el tribunal el que designe quién asume los gastos».

«Estoy muy guapa ahí, así de joven...»

El alzhéimer de Carmen Sevilla se ha hecho tan evidente que, tal y como relata Marilí Coll, amiga de la presentadora, su mente le juega malas pasadas y le hace protagonizar más de una anécdota. Una de las últimas ocurrió tras el fallecimeinto de Sara Montiel. Carmen tuvo una confusión muy curiosa. Mientras veía la noticia del fallecimiento de «Saritísima» en televisión, «al principio preguntó que quién era esa mujer, pero pasado un rato comentó: ''Estoy muy guapa ahí, así de joven''», recuerda Coll. Realmente, la imagen que salía en antena era la de Montiel, pero, por un momento, la enfermedad le hizo creer a Carmen que ella era la protagonista de «El último cuplé».