El presidente tunecino dice que la nueva Constitución incluirá referencias a los derechos de las mujeres

Marzouki, que fue preso político durante el régimen del presidente Zine al Abidine Ben Alí, derrocado en enero de 2011, fue elegido presidente en el marco de un acuerdo para compartir el poder con el partido islamista moderado Ennahda, el ganador de la elecciones del pasado octubre.

El cargo con más poder, el de primer ministro, lo ocupará Hamadi Jbeli, de Ennahda, y esto ha hecho que surjan los temores por la posibilidad de que en Túnez se establezcan normas morales y legales basadas en un islam estricto.

En una entrevista con el portal de noticias francés 'Mediapart', Marzouki ha restado importancia a esos temores al afirmar que el respeto de los Derechos Humanos y, en particular, el respeto de los derechos de las mujeres fue una condición importante cuando se firmó el acuerdo para compartir el poder.

Las partes de la coalición están redactando una nueva Carta Magna que, según el presidente, convertirá esas demandas en leyes. "Con toda probabilidad, vamos a tener una Constitución muy específica en lo que se refiere a los Derechos Humanos, los derechos de las mujeres y las libertades públicas y privadas", ha señalado. "Vamos a tener el mejor texto posible, pero necesitaremos un tribunal constitucional para protegerlo", ha añadido.

Túnez fue el país donde comenzó, el pasado enero, la llamada 'Primavera Arabe', una ola de revoluciones y protestas en favor de sistemas democráticos. Marzouki ha admitido que la dictadura de Ben Alí ha dejado cicatrices a los tunecinos y ha asegurado que los nuevos dirigentes harán todo lo posible para repartir el poder entre el presidente y el primer ministro y así evitar que se repita la historia.