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Fe y audacia por Sigifredo Noriega

La Razón
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No es la expectativa que generaba el Papa Juan Pablo II. Benedicto XVI nos visita por primera vez y en un contexto delicado. Aunque el alma cristiana del pueblo mexicano sigue siendo la misma, sus preocupaciones han cambiado en los últimos años. No es sólo la violencia sanguinaria que se ha apoderado de muchos corazones y está robando la esperanza de mucha gente, sino que es también el sentimiento de impotencia y de desencanto que hay en nuestros jóvenes. Necesitamos un mensaje de esperanza que nazca del Evangelio e ilumine las complejas realidades que vivimos.

Benedicto XVI es el Papa de la nueva evangelización. Esperamos que su presencia y su mensaje ayuden a despertar nuestra fe, a transmitirla con audacia y hacerla operativa. Es urgente por los cambios culturales que vivimos y por los vacíos peligrosos que todo cambio deja a su paso.

 

Sigifredo Noriega
Obispo de Ensenada (México)