Basauri

El fiscal pide que dos etarras en libertad condicional no puedan ir a Bilbao

La Fiscalía ha pedido al juez central de Vigilancia Penitenciaria, José Luis Castro que imponga a los presos etarras Fernando de Luis Astarloa y José Manuel Fernández Pérez de Nanclares, a los que ha concedido la libertad condicional, la prohibición de acercarse a Bilbao, donde residen sus víctimas.

En sendos recursos remitidos al Juzgado, el fiscal de la Audiencia Nacional Carlos Bautista "no discute"la libertad condicional concedida a los terroristas el pasado lunes, pero sí discrepa de que considerase innecesario imponerles la prohibición de acercarse o residir en la capital vizcaína.

Castro señalaba en sus autos que Astarloa, que cumple condena en la prisión alavesa de Nanclares de Oca, "ha fijado su proyecto de vida"fuera de Bilbao, y que Pérez de Nanclares, preso en la cárcel de Basauri (Vizcaya), ha disfrutado de permisos "sin incidencia negativa de ningún tipo".

Sin embargo, el Ministerio Público critica que Castro haya asumido de "manera íntegra e incondicionada"los informes favorables de las respectivas Juntas de Tratamiento de los centros penitenciarios, cuando el alejamiento debería acordarse no "desde la visión del interno, sino desde las víctimas y sus familiares", pues su aceptación "no genera perjuicio alguno"para los reclusos.

"Debe resaltarse que en este tipo de prohibiciones tiene más peso la protección a las víctimas que el control de la libertad del penado", insiste el fiscal antes de incidir en que la medida no se encamina sólo a evitar el riesgo físico de aquellas, sino que debe extenderse "al equilibrio psicológico y emocional"de las mismas.

 Y además, "resulta compatible un pronóstico de reinserción impecable con la imposición de dichas reglas de conducta", subraya Bautista en sus escritos.

También asegura que no es "óbice"para desestimar esta medida el hecho de que los condenados no conozcan a los familiares de sus víctimas, ya que la cuestión es que éstos sí saben quién es el asesino de su allegado, "y padecen con el simple hecho de verle cerca de sus domicilios o en el lugar del hecho".

Por ello, "para evitar dicho menoscabo y exclusivamente guiado por su propósito de hacer compatibles"los derechos del penado y la protección de las víctimas es por lo que la Fiscalía solicita a Castro que revoque parcialmente sus autos, manteniendo la libertad condicional de Pérez de Nanclares y de Astarloa pero fijándoles la "regla de conducta"de no aproximarse a Bilbao.

 En sus resoluciones, el magistrado argumentaba que ambos reclusos han cumplido las tres cuartas partes de sus condenas, han manifestado por escrito su renuncia a la violencia reconociendo el daño causado y pidiendo perdón a las víctimas y se han comprometido a hacer frente, "en la medida de sus posibilidades", a la responsabilidad civil.

Además, instaba a Instituciones Penitenciarias a que estudiara la "posibilidad y pertinencia"de que los reclusos participen en "programas de mediación o encuentros con las víctimas, de carácter voluntario, especialmente para las víctimas", en cuyo caso Prisiones deberá informar al juzgado del protocolo de actuación de dichas reuniones y el contenido de su seguimiento.

Castro tomó esta decisión después de que el Ministerio del Interior anunciara la puesta en marcha de un programa integral dirigido a presos por delitos de terrorismo vinculados no sólo a ETA, sino también a los GRAPO y los grupos yihadistas e incluso el crimen organizado, para facilitar su reinserción y evitar su radicalización en las cárceles.