Barcelona

Comunismo por Sabino MÉNDEZ

La Razón
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Si observamos atentamente la Historia, comprobaremos que, finalmente, ha sido siempre el comercio más puro y duro quién ha llevado a cabo las pretensiones que hace siglos soñaron los marxistas. Debido a esa constatación empírica, yo siempre sostengo que el país más comunista del mundo es Estados Unidos y que, por eso, a mí se me haría duro vivir allí. Ahora, una iniciativa comercial viene a poner otro clavo al ataúd marxista. En Barcelona y Madrid han aparecido unas empresas que alquilan coches por minutos. Por el módico precio de cincuenta euros anuales entras a formar parte del club y, cuando lo necesitas, puedes disponer de un coche, pagando nueve euros la hora, que desaparece cuando has acabado tu recado.La excelente idea proviene de unos avispados en estadística que se dieron cuenta que muchos coches se pasan aparcados e inmóviles el 97% de su vida útil. Con una buena gestión y diversos usuarios, se podía dar un uso más continuado y mejor rendimiento a esos artefactos. Descongestiona las calles y contamina menos. Cuando un cliente lo deja, otro ha de estar listo para usarlo. Dado el precio de los aparcamientos, seguros, revisiones y talleres, no cabe duda que la iniciativa, a la que esté un poco bien llevada, será un éxito porque libra al usuario de esas preocupaciones. Todos estamos tan hartos del coche como de la tele y, de la misma manera que los que tan sólo ocasionalmente vemos la tele preferimos ver los partidos de la selección junto con los amigos (de forma colectiva), hacerlos ocasionales y compartidos puede ser un éxito.El coche comunal, por tanto, ya está aquí, amigos, y finalmente no ha sido la ideología o el estado quién nos lo ha traído sino, de nuevo, el bueno y viejo comercio. Esa venerable y antiquísima red de afectos entre los humanos.