Carta abierta

Querido Dominique: chico, no somos nadie. Creemos que podemos dar lecciones al mundo y levantar el pulgar si un país tiene futuro o bajarlo para hundir las expectativas propias y de las inversiones que podrían sacarlo del hoyo y resulta que, ay, no somos nadie. «No somos nadie» es mi frase hecha favorita, aunque imagino que la tuya a estas alturas será «no es lo que parece». Mira, yo pienso que todo esto es un malentendido mega desagradable y que lo que ha ocurrido de verdad es que tu suite de tres mil euros la noche no era la tuya en realidad. Seguramente, los clientes de las suites de más de dos mil euros la noche tenéis todos una pinta parecida, y desnudos, ya ni te cuento. La pobre camarera estará super aturdida y es posible que no sepa distinguir entre tíos en pelota picada. Tú tranquilo. Estamos convencidos de que «todo tiene una explicación», otra frase hecha que me fascina.
Hombre, también puede haber ocurrido que fuera tu suite de más de dos mil euros la noche. Han dicho en el FMI que ellos no te la pagaban, así que nos hemos quedado todos hiper tranquilos porque te la costeas tú. Podríamos preguntarnos también dónde queda la ética pública que se le supone a un cargo como el tuyo, la prudencia, el control, el qué dirán en un gasto tan excesivo y tan grosero, pero tú argumentarás que con tu dinero haces lo que te da la gana mientras fiscalizas el de los demás. Puede ser también que lo de la camarera fuera consentido, ojo. Que ella, la camarera, te tendiera una trampa y que tus contrincantes a la presidencia francesa estén ahora partiéndose la caja. Esto, lejos de provocar pena, lo que provoca es cosica. Tirando la cosica a arcada seca, pero vamos, que si es eso, es que eres directamente idiota.
Lo que yo descarto es lo otro. Ay, mira, no. Que no, que no, que no es posible. Yo veo tus imágenes detenido y, en tu cara, lejos de arrepentimiento o de vergüenza, lo que veo es que como los pilles a todos sin esposas se van a enterar esos paletos, y un hombre de tu categoría no puede mirar así a la gente si es real lo que dice el fiscal. Con la presunción de inocencia, te mando recuerdos de la generación perdida en España que auguraste. Y mi pésame también. Qué ganas te tiene el personal y todo lo que tú, desde tu cargo, representas. Igual ahí damos con la tecla. Besos, tesorito.