Barcelona
Hereu tiende ahora la mano a la Sagrada Familia
Pasada la exaltación por la visita de Benedicto XVI a Barcelona, la ciudad ha recuperado la normalidad. A primera hora de la mañana de ayer los servicios de limpieza colocaron de nuevo las papeleras en las calles cercanas al templo, retiraron las vallas de seguridad y se empezaron a desmontar las 33 pantallas. Mientras Benedicto XVI descansa de su viaje en el Vaticano, la otra protagonista, la Sagrada Familia, sigue siendo el centro de atención.
Tras el viaje del Pontífice, las ganas de poner punto y final a la construcción de la obra de Gaudí y de acabar el proyecto que rodea a la basílica son ahora mayores. Ayer, el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, tras hacer un positivo balance de la visita del Santo Padre, pidió «conocer» más de cerca el proyecto. «Ha llegado el momento de construir y preparar conjuntamente el presente y el futuro de la Sagrada Familia», dijo Hereu. «Durante 128 años el proyecto ha ido por un lado y la ciudad por otro, pero ha llegado el momento que el Ayuntamiento y la ciudad conozcan el proyecto y se pueda trabajar en el desarrollo del templo», especificó el primer edil.
Los derribos quedan lejos
El domingo, el arquitecto jefe del proyecto de la Sagrada Familia, Jordi Bonet, predijo que la obra podría estar terminada en el año 2026, año del centenario de la muerte de Gaudí. El proyecto prevé derribar algunos de los edificios de la calle Mallorca, entre Marina y Sardenya. Ante el derribo necesario de estos edificios para construir el acceso principal a la basílica, el alcalde señaló que «aún no ha llegado el momento de hablar de las expropiaciones necesarias», dijo.
Aunque nadie duda del éxito de la visita del Papa para la proyección de la ciudad, las palabras de Hereu recibieron duras críticas de la oposición. El presidente del grupo municipal de CiU en el Ayuntamiento, Xavier Trias, consideró que «la posición del Ayuntamiento de menosprecio durante años hacia la Sagrada Familia ha sido muy grave». «No ser capaz de percibir su importancia es un gran error», subrayó dirigiéndose a Hereu.
Después de que el alcalde manifestara que la visita del Papa marca un hito en la historia de la Sagrada Familia, Trias, con un tono de ironía, celebró que el primer edil descubra ahora el valor de este monumento. «Yo mantengo unas magníficas relaciones con sus responsables y espero mantenerlas en caso de ser alcalde», recordó Trias.
ICV y la Iglesia
Por su parte, el presidente municipal del PP en el Ayuntamiento, Alberto Fernández, reclamó a Hereu, que disuelva la Oficina de Asuntos Religiosos gestionada por ICV-EUiA. «ICV-EUiA ha boicoteado la visita del Papa y ha criticado duramente a la Iglesia y a la religión católica», lamentó Fernández. «¿Qué sentido tiene que la oficina esté en manos de ICV-EUiA cuando más que mediar y resolver cualquier controversia declaran la guerra?», se preguntó . «No expresan su hostilidad a la Iglesia católica y con los musulmanes se limitan a decir amén sin entrar nunca en conflicto», criticó Fernández, que apostó por integrar la oficina en Presidencia de la Generalitat. Además de todo lo positivo que conllevó la visita del Papa, ésta sirvió para «afianzar los valores cristianos y de defensa de la familia», dijo.
Reabren la calle Mallorca
Adif anunció ayer que ha concluído las obras de urbanización de la calle Mallorca entre las calles Felip II y Avinguda de la Meridiana. Este tramo se inscribe en la construcción del túnel de conexión Sants- La Sagrera de la línea de Alta velocidad que une Madrid, Barcelona y la frontera francesa. La culminación de los trabajos permitió ayer reabrir completamente el tramo de la calle Mallorca al tráfico de vehículos y peatones desde agosto de 2009. Tras las obras se ha repuesto 10.000 metros cuadrados de calzada y 7.000 de loseta para reurbanizar las aceras.
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