Barça con estrés

Sandro Rosell, presidente del Barcelona, sometió al club a las pruebas económicas de estrés y le salieron negativas. En tales circunstancias, no ha podido satisfacer las peticiones de Guardiola. Aún no ha cerrado los fichajes de Cesc y Alexis Sánchez. El Madrid, parece que sin menos apreturas financieras, ha puesto en manos de su entrenador todo lo que ha pedido. El Barça afronta la temporada, de nuevo, con plantilla «pelín corta», que dijo hace dos campañas su técnico. En ambas resolvió los problemas favorablemente puesto que ganó la Liga y la Liga de Campeones. El futuro inmediato no parece tan entusiasmante.
El club barcelonés, hace unos años, cuando los triunfos no le favorecían, echaba mano de la chequera y contrataba cuantos jugadores necesitaba. Y los que no necesitaba, también. Han cambiado los tiempos y se ha puesto la mirada en sólo dos hombres. Ambos tienen precio de orillo y la caja del Camp Nou tiene telarañas. No recuerdo tiempo en que para fichar el club se planteará la necesidad de vender. Se da la circunstancia de que, además, pone en venta jugadores de la cantera, lo que contradice la política que tantos éxitos le ha proporcionado en los últimos años. Solamente se explica el despido si para el mismo puesto tiene cromos repetidos. El Madrid, esta vez, sólo tiene problemas con el caso Neymar. Florentino no se dará por vencido. Es la guinda del año. Posdata. Los futbolistas argentinos y brasileños deberían perder cotización en el Ibex futbolístico. Han fracasado en Copa América.