Moscú
Capitán América contra la crisis
Mientras Europa camina sobre la cuerda floja y la prima de riesgo nos ahoga, el héroe de las barras y estrellas desembarca en pleno conflicto económico. ¿Casualidad?
Con este calor y la que está cayendo en el mundo por la delicada situación económica de Europa (con España en el epicentro) y Estados Unidos, parece que más que nunca necesitamos un héroe que nos salve de la catástrofe. Hoy se estrena, también en 3D, el considerado icono más patriótico de EE UU: el Capitán América. Después del estreno de «Thor» y «Linterna verde», ahora le toca el turno a un clásico de la factoría Marvel que promete arrasar en taquilla este verano. Su llegada viene precedida de unas ganancias de 65,7 millones de dólares (más de 50 millones de euros) en su primer fin de semana de estreno en EE UU, sacándole incluso ventaja a la última película de la saga de Harry Potter y batiendo las marcas de las dos cintas anteriores de superhéroes.
La trama se desarrolla en paralelo al origen del personaje en el cómic original. El ciudadano Steve Rogers, interpretado por Chris Evans (la antorcha humana en «Los 4 fantásticos»), débil y enfermizo, intenta ingresar en el Ejército sin conseguirlo. Deseoso de ayudar a su país a cualquier precio, se ofrece voluntario para un proyecto secreto del Gobierno llamado «Operación Renacimiento» con el objeto de crear un ejército de súper soldados y luchar contra Hydra, asociación secreta vinculada al nazismo más exacerbado. La cinta, dirigida por Joe Johnston («El hombre lobo»), cuenta con Hugo Weaving («Matrix»), en el papel del archienemigo del Capitán y adalid de los nazis, Cráneo Rojo; Tommy Lee Jones, y Samuel L. Jackson, entre otros. Ésta es tan sólo la primera película que vendrá vinculada con el mundo de «Los Vengadores», un grupo de superhéroes que forman el propio Capitán América, Thor o Hulk. La autocrítica americana tiene también su sitio en la cinta cuando el protagonista es víctima de su propia fama y resulta que sólo sirve como producto del sistema gubernamental americano para animar a los soldados en la Segunda Guerra Mundial. En este sentido el argumento es muy fiel, quizá demasiado, al personaje creado para el cómic.
Sueño americano
La población americana de los años posteriores a la Gran Depresión se enfrentaba a un nuevo enemigo: los seguidores del partido nacionalsocialista en Alemania que habían ganado las elecciones y propiciado el comienzo de la Segunda Guerra mundial. El personaje nació en 1941 de la mano de Joe Simon y Jack Kirby, para resucitar el espíritu de la nación, contrarrestar las campañas publicitarias alemanas, y darle en las narices al régimen de Hitler. Más que una idea, más que un héroe para los niños y los soldados, el «Capi» o su nombre real Steve Rogers, se esgrimió como arma de propaganda. Frente a una Europa imperialista y guerrera, se presentaba una América democrática y libre, y el personaje llegó a ser dibujado en el primer número del cómic, de marzo de 1941, golpeando al mismísimo Führer. En palabras de uno de sus creadores, Simon, «representa todo lo que hace que Estados Unidos sea el mejor lugar del mundo para vivir». Aunque él mismo asegura que «fue creado para divertir, no para hacer propaganda, si bien eso no impidió que nos criticaran los simpatizantes nazis en EE UU».
Creado tan sólo dos meses antes de que EE UU entrara en la guerra, su llama de idealismo se apagó cuando ésta terminó en 1945. En los años 50 hubo una futil idea de devolverlo a la vida para que luchara contra el avance comunista, aunque no cuajó. Nueve años más tarde lo resucitó uno de los mejores guionistas de cómics de la historia, Stan Lee, que se hizo cargo del personaje y lo sacó de su letargo de hielo para encarnar la justicia, desligándolo de cualquier elemento patriótico, aunque conservara sus principios y el uniforme. En esos momentos se ganó el apelativo de «Centinela de la libertad»
El triunfo del Capitán América está ligado con su aspecto –traje con los colores de la bandera, una gran «A» en la máscara y un escudo con el rojo, el azul, y una enorme estrella blanca–, pero también con los nuevos ideales que pretenden ser una representación de la conciencia y la moral americanas. Lucha siempre, de manera bastante endeble para ser un super héore, por la justicia, la paz y el ideal democrático, y siempre contra el concepto del mal, y aunque en sus aventuras de los años 40 llevó revólver, es un personaje que sólo ha matado una vez en sus 70 años de historia. Su origen es humilde –el barrio de Lower East Side de Manhattan–, y su apariencia es de chico normal, hijo de inmigrantes irlandeses (los padres de los creadores eran sastres inmigrantes). Sus poderes no radican en ningún origen extraterrestre y no puede lanzar rayos; sólo es un ser humano normal con un cuerpo atléticamente perfecto y con una cantidad extra de destreza y fuerza física. Como representación fiel de la sociedad de la época, incluso llegó a enfrentarse con el mismísimo presidente de los EE UU cuando éste estaba asociado a una trama de corrupción, lo que coincidió en los kioskos con el caso Watergate.
El personaje, en cualquier caso, es bastante complejo. Supeditado a los éxitos de ventas de los cómics, ha pasado por etapas en las que debía desvelar su propia identidad, ha muerto dos veces, en varias ocasiones incluso renegó del Gobierno para ir por libre, y al final rompió su regla más estricta al matar a un secuestrador que amenazaba con asesinar a unos rehenes.
Tras varios intentos –en 1944 se realizaron seriales y en 1990 un filme de muy mala calidad–, parece que la factoría Marvel va a apostar fuerte por el mundo de los héroes y están previstas hasta cinco películas más: las dos siguientes partes del Capitán América y la primera de los Vengadores, que se estrenará en 2012, dirigida por Joss Whedon, seguida de otras dos, en un periplo que nos hará disfrutar durante 10 años de cintas llenas de héroes. Como matizó Joe Simon: «El Capitán América es otra vez popular porque el mundo está en una situación bastante peligrosa, y es un héroe que puede ayudarnos a atravesar por momentos difíciles».
En Rusia será «El primer vengador»
Si la semana pasada vimos cómo amanecía el centro de Moscú empapelado con unos carteles trucados de «Capitán América», en los que se había sustituido el escudo por un Mac y la cara del protagonista por la de Medvdev, presidente ruso, ahora, países críticos con todo producto que provenga de EE UU, como Rusia, Corea del Sur y Ucrania, han decidido publicitar la cinta como «El primer vengador», aunque el protagonista siga siendo el héroe de barras y estrellas.
EL CÓMIC
Sólo para fans
Siendo sinceros, la película llegará a contentar a los fans más puristas de las historias dibujadas del héroe americano. La cinta desgrana el origen del mito y nos enseña distintas versiones que hemos visto en su evolución en papel desde hace 70 años. Si siguen por esa línea, podremos disfrutar de sus mejores historias; del papel a la pantalla.
✕
Accede a tu cuenta para comentar