Queridos jóvenes: la gravedad de la situación económica y social europea

Queridos jóvenes: la gravedad de la situación económica y social europea es inmensa, y no podemos olvidarlo en este dramático mes de agosto en el que el Papa llega a Madrid. Como cristianos, hemos de ejercitar incesantemente la caridad con los que mas sufren. Y como ciudadanos, la solidaridad. Ambas con el más profundo sentido de nuestro compromiso. Éste es el espíritu con el que debemos recibirle, pero enriqueciéndolo además con una dimensión auténticamente festiva.Una joven y brillante abogada, que viaja siempre con su guitarra y sus canciones a cuestas y es activa participante de estas JMJ, me ha recordado estos días a Harvey Cox. Según este prestigioso teólogo protestante, al que Benedicto XVI citó en su primer discurso como Papa, no hay motivos para que los que saben gozar de la vida no puedan al mismo tiempo comprometerse con un hondo cambio social.
La fiesta es sólo una tregua en el protagonismo histórico del hombre, un tiempo en el que suspendemos el trabajo para recordar que en nuestra vida existen muchas otras dimensiones, y que hemos de reconciliar nuestro ser instrumental con nuestro ser expresivo y gozoso. Abandonemos, por un breve instante, las preocupaciones que nos crean una inevitable pesadumbre, y celebremos la fiesta del Papa con una verdadera alegría que se trascienda en esperanza.

Gregorio Marañón y Bertrán de Lis
Real Academia de Bellas Artes de San Fernando