Melilla

Los sindicatos policiales piden refuerzos en la frontera de Melilla

El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha pedido que la frontera de Melilla se refuerce con 200 agentes más, que se unan al centenar que hay en la actualidad, para garantizar la seguridad de los funcionarios y las 30.000 personas que a diario pasan por la frontera.

En un comunicado, el secretario general del SUP en Melilla, Julián Millán, ha informado de que esta petición se presentará mañana por escrito en la Jefatura Superior de Policía, al considerar "intolerables"las condiciones en las que los funcionarios policiales están desempeñando su trabajo en la frontera.

Esta petición se produce después de las denuncias del Gobierno de Rabat de los últimos días sobre presuntas agresiones racistas en la frontera de Melilla y sobre el supuesto abandono frente a sus costas de ocho inmigrantes subsaharianos en mal estado de salud por parte de la Guardia Civil.

El escrito, al que ha tenido acceso Efe, explica que este dispositivo debe contar con una primera línea de funcionarios especializados en el control de masas, encargados de canalizar a peatones y vehículos.

Además, el sindicato cree que los controles policiales en las zonas peatonales y de paso de vehículos "en ningún caso deben disponerse a menos de treinta metros de la verja de entrada"a Melilla.

Esta petición afecta también a la Guardia Civil, ya que el SUP considera que sus efectivos destinados en la frontera deben "desplazarse hacia el interior del recinto", el cual "debe estar dotado para la función de registro y control fiscal que le corresponde"

La solicitud del SUP incluye como tercera medida que se permita la entrada de los periodistas melillenses a la frontera, ya que en la actualidad tienen prohibido captar imágenes de esta infraestructura si no es con una autorización especial de la Delegación del Gobierno.

Para el SUP, es necesaria la presencia de los profesionales de la prensa para que puedan realizar fotografías y vídeos de las actuaciones policiales marroquíes que, según Millán, en algunos casos pueden ser constitutivos de delito "incluso en su propio país".

Hace días, el SUP pidió también que se celebre una reunión con el gobernador de Nador (Marruecos) para exponer la necesidad de respetar la franja de seguridad en la frontera para "acabar con las agresiones a policías españoles".