«Mi combate no es contra las cámaras»

Lo cierto es que el fuerte del líder del PSC no es la exposición en público. Montilla ha mejorado, pero sigue arrastrando carencias en su puesta en escena. Sin embargo, a él no le «preocupa demasiado» su imagen. Ayer, en la víspera del cara a cara que va a celebrar con Mas (si la Junta Electoral no lo impide), lanzó un mensaje muy calculado: «Mi principal combate no es contra las cámaras, sino contra la crisis».

El candidato del PSC prosiguió ayer su periplo por el área metropolitana después de haber visitado durante el fin de semana Girona y Lleida. Desde Granollers, Montilla restó importancia a sus déficits verborreicos. «Yo no me examino para un concurso de oratoria, yo me presento para ser vuestro presidente, y me presento con mis hechos, mis palabras, mis convicciones plenas y mis valores irrenunciables», dijo.

El aspirante a la reelección estuvo acompañado, de nuevo, por el ex presidente del Gobierno Felipe González, quien habló de las abiertas discrepancias que el Govern de PSC, ERC e ICV ha tenido durante sus mandatos. «Si el ruido de tripartito no hubiera impedido explicar el pedazo de gestión que has hecho, estaríamos en otras condiciones», afirmó González.

El candidato del PSC también quiso explicar sus planes para diseñar el Govern en el (improbable) caso de que logre gobernar en solitario. Lo que pretende es reducir el número de consellerias y agruparlas en cinco grandes áreas: Economía, Conocimiento, Política Territorial, Vivienda y Medio Ambiente.

Su objetivo, explicó, es formar un gobierno paritario y austero, reducido, eficaz, con grandes áreas de gestión y en el que se potencie el papel de los secretarios generales.


Pretoria entra en campaña
- José Montilla habló ayer por primera vez en esta campaña electoral del caso Pretoria de corrupción urbanística, que implicaba a varios cargos socialistas, pero fue para atacar a CiU por la presunta financiación irregular de Convergència.
- «Los socialistas no tardamos ni dos horas en apartar a los implicados en el caso Pretoria de la militancia», dijo. Y añadió: «Pero es evidente que no todos actuamos de la misma manera».