Belgrado
Europa elige a sus tres «misses» urbanas
Disfrutar del paisaje paradisíaco de una isla no es exclusivo de Las Seychelles, Mauricio o, sin ir tan lejos, de Canarias. Los espacios urbanos también cuentan con sus propios encantos, ya hasta se han popularizado en las capitales europeas las playas en la ribera de los ríos, a pocos metros del bullicio del tráfico, los edificios y el frenesí de las metrópolis. Es el caso de Madrid, París o Praga.
Si hasta en Madrid hay playa, en la capital gala o en la checa, ¿por qué no atractivas islas? Tal es el ranking elaborado por la agencia de viajes en línea «VirtualTourist», que ha seleccionado las diez mejores islas en destinos urbanos. Todas ellas aúnan para turistas y autóctonos encanto, tranquilidad y, a menudo, una pintoresca oferta cultural en un entorno que parece impropio de una gran ciudad.
París, Praga, Belgrado
La ganadora ha sido Île Saint-Louis, en París, ciudad conocida por su sofisticación y elegancia, en la que este pequeño reducto actúa como un típico ejemplo del eufemismo francés. Tal vez su mejor atracción es la famosa tienda de helados «Berthillon». La mayor parte de la isla se dedica a fines residenciales, pero hay varios restaurantes, tiendas, cafeterías, así como la Iglesia de St. Louis en L'Île. En la novela de Marcel Proust «En busca del tiempo perdido» su heroína dijo que sería un «escándalo» vivir allí. A tal punto cayó la imagen de la localidad, nada más lejos de su exclusividad actual.
En segundo lugar encontramos la isla de Kampa, en Praga. La capital checa, dividida por el río Moldava, encuentra en Kampa un espacio neutral entre la mirada del Teatro Nacional y el barrio judío, de un lado, y el castillo, del otro. Transformada en isla por la «Corriente del Diablo» (Certovka), un canal cavado para molinos de agua (sólo se conserva uno), es también conocida como «la pequeña Venecia». Sobre ella cruza el Puente de Carlos, uno de los lugares más fotografiados de Europa. Los fans de «Los Beatles» conocen Kampa por su «Muro de Lennon», sobre el que los visitantes escriben poemas, canciones y rinden homenaje al malogrado miembro de la banda.
En tercer lugar en el podio emerge Ada Ciganlija, en Belgrado. Un espacio en el que practicar todo tipo de deportes. Situada en el curso del río Sava en el centro de la capital serbia, ha obtenido reconocimiento internacional por sus playas e instalaciones deportivas, que, durante temporadas de verano, puede tener hasta 300.000 visitantes durante el fin de semana. Se la conoce como el «Mar de Belgrado».
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