Fiestas de fin de año

En estas fechas, vuelve siempre como tema recurrente, el si han decaído las celebraciones de fin de año, si ya no son lo que eran, si la crisis ha influido en estos aspectos. Al final, cada cual se monta su propia celebración, que es la mejor del mundo, en el caso que sea un adicto a estos festejos. A muchos, una cena agradable, tomarse las uvas y dormir pronto, les parece estupendo porque disfrutan de la primera mañana del año, que se te ofrece como si fueses el amo del mundo, ya que la gente duerme hasta tarde. Que duda hay de que los recortes llegan aunque no quieras. Algunos no emplean la tijera por necesidad, lo hacen por ejemplaridad, ahí está el caso de la pareja mas popular a nivel mundial, al menos este año. Me refiero a los duques de Cambridge. Han decidido no irse a ninguna playa idílica del Caribe, Pacifico o Índico. Se van a montar la «fiestuca», con su hermano, que ya se sabe que metido en faena es una auténtica feria. Con papá Carlos que pone una finca en Escocia y, claro está, con la madrastra. A este nombre siempre le pones la imagen de la de Blancanieves, pero la verdad es que Camila, duquesa de Cornualles, guapa no es, pero es una buena mujer, muy limpia, que además, desde que estuvo en Sevilla, vive fascinada por el flamenco, del que piensa dar una pincelada en la celebración real. De todas formas, no es bueno que los festejos sean demasiado austeros. Los hoteles, los restaurantes, las discotecas, también necesitan liquidez. Porque son parte esencial de la primera industria del país, el turismo, que es la única actividad que crece. Sin contar que los empresarios de este indispensable sector también tienen que pagar sus nóminas, los impuestos y todos los gastos. Así que tiremos por un día la casa por la ventana, que de alguna forma estamos mejorando las cuentas de la ciudad y del país.