Ciudad Real

Cospedal lleva al centro de su campaña la exigencia del adelanto electoral

Cuarto día de campaña electoral y Mariano Rajoy no se despega de su discurso económico ni siquiera para valorar los contundentes mensajes de otros compañeros de partido, como el ex presidente José María Aznar o Esperanza Aguirre, sobre la presencia de Bildu en las elecciones.

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El líder popular visitó ayer Canarias, con mitin de aperitivo y otro por la tarde. Y el balance de la doctrina que aireó es prácticamente calcado del que se escuchó en las otras «plazas» que ya ha visitado. El mantra «marianista» está ya dibujado: el PP es el partido del empleo, y el PSOE, el del paro; la culpa de la crisis es de Zapatero; y él sólo habla de los «problemas de los ciudadanos». «Decir que la culpa [de la crisis] la tienen quienes gobernaban hace siete años es lo mismo que decir que Di Stéfano es el culpable de que el Madrid no haya llegado a la final de la Champions», comentó en Santa Cruz de Tenerife, informa Efe.

La caravana de Rajoy ha dado hasta hoy pocas emociones, pero la sal y la pimienta ya se encargan de echarla otros, como la candidata a la Junta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal. En el desarrollo de una agenda frenética –que ayer la llevó a Guadalajara, Toledo y Ciudad Real, para volver a dormir a la primera– la invitada estrella fue Esperanza Aguirre. Las dos se dieron primero un populoso paseo por Leganés (Madrid) antes de arengar a la militancia en Esquivias (Toledo), bajo la bandera de que el 22-M hay que votar contra la «incompetencia, la falta de sensibilidad y la irresponsabilidad» de Zapatero, informa Efe.

Por primera vez en lo que es campaña formal, Cospedal instó a Zapatero a convocar elecciones generales el 23-M, mientras que Aguirre animó a los votantes a utilizar estas elecciones para presentar una moción de censura contra el socialismo. «Que Rodríguez Zapatero, que nos deja casi cinco millones de parados, diga que su gran ilusión es que un socialista gane las próximas generales es para convocar elecciones», proclamó Cospedal, quien se reservó para el plato fuerte del día, un mitin en Tomelloso, en la provincia clave de Ciudad Real.

Allí, la popular dijo no entender por qué su adversario, José María Barreda, no quiere que acudan a la región miembros del Gobierno de Zapatero, pues si éste es un «mal gobernante», Barreda «le supera y con creces». Cospedal dijo no saber si Barreda no acudió por no coincidir con el PP o para que no le vean con miembros del Gobierno, respecto a lo que citó dos dichos populares: «Quien muerde la mano que le da de comer nunca obtiene una buena recompensa» y «Roma no paga a traidores».