ETA responde a Patxi López y exige verificar la tregua a su medida

MADRID-ETA rizó ayer el rizó, y anunció, a bombo y platillo, que va a colaborar con la «Comisión Internacional de Verificación del Alto el Fuego» que, curiosamente, propuso la propia banda en su comunicado de enero. Es decir, acepta lo que ella postula.

Los diarios «Gara» y «Berria» publicarán hoy un nuevo comunicado en el que se concretarán los detalles de esta colaboración. De momento, lo que se ha sabido es que ETA ha engañado a los miembros de dicha «Comisión» ya que, según reveló ayer uno de sus miembros, se había comprometido a que el alto el fuego sería «unilateral y sin condiciones», cuando es sabido que los terroristas han impuesto condiciones desde el primer momento.

Coincidencia
El anuncio de la banda coincidió en el tiempo con otro: el de la supuesta disolución de Ekin, su «comisariado político», lo que ha sido acogido por los expertos antiterroristas como una trampa y una estratagema más para apoyar electoralmente a la llamada «izquierda abertzale» (Batasuna), que se va a presentar a las elecciones generales en la coalición Amaiur; y, de paso, a los que parecen encantados con esta espiral de anuncios, fruto de un plan preestablecido, en especial socialistas y nacionalistas.

Lo que parece claro, según expertos antiterroristas, consultados por LA RAZÓN, es que ETA marca los tiempos y está logrando llevan el asunto del alto el fuego, los presos y el apoyo electoral a la «izquierda abertzale», al ritmo y con los pasos que le interesan.

En este caso, el diario «Gara» difundió anoche extractos del comunicado destacando que la banda llevará «esta oportunidad hasta el final» y «también mediante un trabajo callado que no ha tenido reflejo público». Acusa a España y Francia de poner zancadillas al proceso «por miedo».

La banda califica a la «Comisión» de «paso importante» para avanzar en el proceso. «Berria», por su parte, revela que ETA se queja de que los Gobiernos español y francés no han reconocido la mencionada «verificación internacional». En cualquier caso, la «Comisión», que preside el singalés Ram Manikkalingam, fundador y director del Dialogue Advisory Group (DAG), con sede en Amsterdam, ha tenido un mal comienzo La banda, como es costumbre a lo largo de su siniestra historia, les ha engañado.

«Sin condiciones»
Según revela Manikkalingam en una entrevista que ayer publicó «Deia», ETA les comunicó que el alto el fuego era unilateral y «sin condiciones». Según los citados expertos, es obvio que nadie se ha molestado en hacer llegar al director del DAG los últimos comunicados de ETA y las condiciones que ponía para el alto el fuego, entre ellas la negociación, la «territorialidad» (anexión de Navarra al País Vasco), independencia, presos, etcétera. Y eso, sin hablar de la última nota de los presos, tan celebrada por algunos, en la que se exige la amnistía total; o las declaraciones de destacados portavoces de la llamada «izquierda abertzale» (Batasuna), como Txelui Moreno, que ponían condiciones al posible desmantelamiento de las «estructuras militares» de la banda.

Con Jesús Eguiguren
Manikkalingam revela que la «comisión» se ha reunido, entre otros, con el presidente del Partido Socialista de Euskadi, Jesús Eguiguren; con el lider del PNV, Íñigo Urkullu; con el presidente de Confebask; con algunos miembros de la Iglesia; con los diferentes sindicatos (ELA, CC.OO., LAB y UGT), y también con Rufi Etxeberria, de la izquierda abertzale.

Por lo que respecta a la «disuelta» Ekin, sus miembros siguen trabajando regularmente para coordinar los trabajos de los grupos del entramado de ETA, según las referidas fuentes. El anuncio de disolución, que ayer publicó el diario «Gara», se asemeja al que realizó en su día la Coordinadora Abertzale Socialista (KAS), cuando los procesos judiciales contra sus miembros iban cobrando fuerza.