El sistema educativo andaluz no mejora y es el peor de la España peninsular

Con respecto a 2006, Andalucía pierde incluso posiciones. Ese año se situó en el puesto décimo, el último de las comunidades que participaron. En el informe hecho público ayer, Madrid y Murcia, que no participaron en la anterior edición, han obtenido mejores resultados, mientras que las citadas Baleares y Canarias han quedado por debajo. Del décimo puesto ha pasado al duodécimo.

Pese a ello, la valoración que hizo el consejero de Educación, Francisco Álvarez de la Chica, fue complaciente. Calificó los resultados de «modestos» y explicó que «mejoramos más lentamente de lo que nos gustaría» y que ahora hay que hacerlo «más rápidamente».

Las frases que utilizó Álvarez de la Chica fueron similares a las que empleó Manuel Chaves en diciembre de 2007, cuando como presidente de la Junta de Andalucía, analizó los resultados del Informe Pisa 2006. «Refleja carencias, pero no estamos tan mal. Sé que tenemos que avanzar mucho más de la situación en la que estamos en estos momentos», argumentó.

De los tres índices que se evalúan, los alumnos andaluces han descendido en dos de ellos –matemáticas y ciencia– y sólo demuestran más capacitación en comprensión lectora. En todos están por debajo de la media española, inferior a la del resto de países de la OCDE.

Para obtener un aprobado, las regiones y/o países que se someten al estudio deben obtener 500 puntos. En el caso de la competencia matemática, los estudiantes andaluces se han quedado en 462, uno menos que en 2006.

En competencia científica el descenso ha sido más acusado, ya que se ha pasado de los 474 puntos de la penúltima edición a los 469 actuales.
En comprensión lectora sí ha habido una mejoría de 16 puntos –se partía de un índice muy bajo– y la puntuación actual ha quedado en 461.

Ante la escasa mejoría registrada en tres años, el consejero de Educación aseguró que a partir de ahora se incidirá más en la educación primaria, ya que «las mejoras en el sistema educativo son lentas». Rechazó que esta nueva estrategia suponga dar por perdida a una generación.
En este sentido, situó el horizonte de 2020 como fecha posible para reducir las diferencias entre los sistemas educativos de las distintas regiones españolas. Según De la Chica, el objetivo es cumplir el reto planteado en la Unión Europea para reducir el abandono escolar a un 10 por ciento –el último sitúa esta tasa en la región en el 37,8–.

El ranking por comunidades autónomas no varía si se tiene en cuenta el índice de estatus social, económico y cultural que también analiza el Informe Pisa. Andalucía seguiría estando por debajo de la media española y sólo delante de Baleares y Canarias. Tampoco en la evaluación de la equidad del sistema educativo, Andalucía obtiene buena puntuación: se sitúa cuarta por la cola, con Madrid, Asturias y La Rioja cerrando la clasificación.