Portugal

Las cajas

La Razón
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Me dicen que Zapatero lleva unos cuantos meses muy preocupado por las Cajas de Ahorros. Mucho más de lo que pudiera desprenderse de sus declaraciones públicas. Me cuentan que tiembla sólo de pensar que en estos días tan turbulentos el Banco de España tuviese que intervenir en una de estas entidades financieras. Eso sería dar la puntilla a la escasa credibilidad que nos va quedando en el exterior, como demuestra el batacazo de ayer del Ibex. En este asunto ha debido enfrentarse, a su manera, eso sí, a los responsables de los Gobiernos Autonómicos, tanto del PP como socialistas, que no quieren dejar que las Cajas salgan de su influencia. Vamos, que, como es público y notorio, desean seguir utilizándolas como bancos públicos en sus Comunidades. A buen seguro que el asunto Cajas es uno más de los que se abordarán en la reunión que celebrarán hoy Zapatero y Rajoy, entrevista que debería haber tenido lugar hace ya unos cuantos meses. No obstante, nunca es tarde si los resultados son positivos. Hay muchos ciudadanos que miran ahí al lado, en el espejo de Portugal, donde los líderes de los dos principales grupos políticos se han puesto las pilas para lograr un acuerdo de mínimos con el que hacer frente a la situación económica crítica.Me permito dudar de que esto sea posible en España, con un Zapatero condicionado por su Cándido Méndez del alma y un Rajoy que se ha sentido engañado en varias ocasiones.