Cristina gana a Kirchner

Cristina Fernández ganará el próximo domingo y es probable que ni necesite segunda ronda. La viuda de Kirchner va camino de liderar el periodo peronista más largo en el poder, superior al de Perón. Los motivos de su supremacía y del sector al que representa son diversos. Cuando nadie apostaba por ella, tras la repentina muerte de su marido, se rodeó de un reducido grupo de colaboradores jóvenes, leales y preparados en lugar de las personas del aparato que elegía Kirchner. Con ellos marcó una nueva estrategia: bajar el tono de confrontación que la estaba desgastando y con un mensaje conciliador vencer la resistencia de la clase media urbana. Esto le permitió barrer en las primarias del pasado agosto. Esta abogada de 58 años, curtida en las más duras batallas de la reciente historia argentina, ha querido mostrarse débil e incorporar factores afectivos y sentimentales a su quehacer; y su estrategia le ha dado buen resultado. Además, le ha tocado una época de vacas gordas en Argentina, con el crecimiento más alto de América Latina. Y ha mantenido un discurso con tintes populistas, lo que no le ha impedido negociar con organismos financieros internacionales ni mimar a los empresarios. En frente, una oposición incapaz de ofrecer una alternativa con una imagen peor que la ofrecida en 2007. Elisa Carrión casi ha desaparecido de la escena política y hoy no llega ni al 3% de apoyo entre los votantes y el radicalismo, que siempre ha sido la oposición al peronismo, sufre desde hace dos décadas su particular debacle.