El Olimpo de la clase media

El fútbol, a veces, es cuestión de detalles. Y en el Grecia-Nigeria hubo tres esenciales para explicar un resultado histórico para los helenos y agónico para los africamos, cuya clasificación para los octavos alcanza ya tintes quimericos: tendrá que ganar a Corea en el último duelo y esperar que Argentina venza a la propia Grecia. En fin, la estúpida expulsión de Sani Keita pasada la media hora, la fortuna de Salpingidis en el em- pate a uno y la «cantada» de Enyeama en el epílogo de otro recital, ya en serio, inclinaron la contienda a favor de los europeos, que marcaron un hito en Bloemfontein al marcar su primer gol en un Mundial –al final fueron dos– y anotarse su primera victoria en su segunda comparecencia en una Copa del Mundo.Y eso que la tarde se torció muy pronto con el gol de la «Águilas Verdes», obra del «almeriense» Kalu Uche. Su falta no la tocó Odenwingie y se la comió Tzorvas para provocar una indigestión bastante seria por cuanto la campeona de Europa en 2004 es- taba en ese fatídico minuto 16 fuera de la competición.Paradójicamente, Sani Keita le echó un cable con una absurda y violenta acción –intento de agresión a Karagounis en una banda– que le costó la roja a él y, a la postre, la derrota a sus compañeros. Porque, sin nada que perder y en superioridad, los helenos tocaron a rebato tras su actitud reticente y hasta huraña del arranque. Rehhagel sacó a Samaras para rearmar su delantera y dio plenos poderes al veterano Karagounis para hacer más eficiente, que no más efectivo, su dominio.La suerte volvió a sonreír a los griegos al filo del descanso, un momento clave. El disparo de Salpingidis tocó en Haruna y despistó al meta nigeriano. Empate a uno, y otro partido más dentro de uno sólo con 45 minutos de duración, los de una segunda parte en la que Nigeria decidió morir matando. Quedó demostrado en 30 segundos del minuto 59: los que fueron desde la intentona de Gekas, estrellada en Enyeama, hasta la emulación de Ayebgei ante Tzorvas y la pifia de Obasi.La prodigiosa mano de Enyeama salvó de nuevo Nigeria en el 68 ante un cabezazo de Samaras, aunque paradójicamente la condenó con una indecisión de la que se aprovechó Torosidis en el 71.

Patrocinio «made in» FIFAEl primer gol de Grecia en un Mundial tras cuatro partidos (tres en Estados Unidos y uno en Suráfrica, 404 minutos de juego en total) lo había marcado un nigeriano. Haruna fue el último en golpear la pelota lanzada por Salpingidis, pero la FIFA le atribuye el tanto al jugador del PAOK de Salónica, que quedará en los anales del fútbol heleno. Debidamente jalonados con el título de campeón de la Eurocopa de 2004 en Portugal. Ficha técnica 2 - Grecia: Alexandros Tzorvas; Alexandros Tziolis, Avraam Papadopoulos, Giorgos Karagounis, Loukas Vyntra, Dimitris Salpingidis, Vassilis Torosidis, Sotirios Kyrgiakos, Fanis Gekas (Sotiris Ninis, m.79), Sokratis Papastathopoulos (Georgios Samaras, m.37), Costas Katsouranis. 1 - Nigeria: Vincent Enyeama, Joseph Yobo, Taye Taiwo (Uwa Echiejile, m.55 -Rabio Afolabi, m.77-), Danny Shittu, Yakubu Ayegbeni, Peter Odemwingie (Chinedu Obasi, m.46), Kalu Uche, Sani Kaita, Lukman Haruna, Chidi Odiah, Dickson Etuhu. Goles: 0-1, m.16: Kalu Uche. 1-1m n.44: Salpingidis. 2-1, m.71: Torosidis. Árbitro: Oscar Ruiz (Colombia). Roja directa a Sani Kaita en el m.33 por una patada a Karagounis. Tarjetas amarillas a Sokratis, Tziolis y Samaras, por parte de Grecia, y a Obasi, de Nigeria. Incidencias. Partido del grupo B, disputado en el estadio Free State de Bloemfontein ante unos 30.000