Ricardo Campos / oftalmólogo y socialista: «Me insinuaron que no me presentara para mostrar unidad»

VALENCIA- ¿Cómo decidió presentarse a la secretaría general de la ciudad de Valencia?
-Estoy indignado por todas las políticas del PP e insatisfecho por la respuesta del PSPV. La tendencia del partido es seguir en esa dinámica por inercia, a repetir siempre los mismos mensajes y la misma forma de hacer política. También las mismas caras.

- ¿Es un error que Joan Calabuig continúe después de los pésimos resultados electorales?
- Tiene su forma de entender la política y con toda legitimidad quiere controlar el grupo municipal y el partido en Valencia. No sé si es un error, pero la dirección del PSPV le apoya. Tampoco creo que perder en las urnas le incapacite para volver a ser candidato.

- ¿Usted aspirará a la alcaldía aunque pierda este proceso?
 - Sí, por supuesto que sí..

- ¿Cree que Calabuig parte con ventaja?
 - Teóricamente sí, es el candidato oficialista y el favorito, pero en este momento la sociedad también busca otro tipo de liderazgo. Quiero encauzar ese sentimiento de desprestigio hacia la política que existe en la calle. Yo no soy un político al uso. Vivo de mi trabajo y voy a seguir siendo médico. Me duele lo que se piensa de los políticos, ya que puedo poner la mano en el fuego por muchos y no sólo del PSOE.

- Es la postura también de Manuel Mata, abogado de profesión, que quiso dirigir el partido, pero que no consiguió ni los avales ¿Le podría suceder también a usted?
- Sí. Yo no estoy en política para hacer pactos. Puede pasar incluso que llegue el Congreso y que no reúna los avales suficientes. El sistema representativo mediante delegados está expuesto a presiones externas. Es terrible cuando un compañero te dice que te puede votar, pero no avalar.

- ¿Puede que no logre los avales?
- Es una incógnita. No tengo acceso a la lista de delegados y es inútil recoger avales.

-¿Confía en obtener por lo menos el mínimo?
- Sí, veo el ambiente y hay personas que han manifestado su disposición de que, aunque les vean, me dará el aval para poder participar.

- Todo el PSPV apostó por «un militante, un voto» ¿Ximo Puig defenderá esta propuesta?
- Si lo ha defendido públicamente, lo seguirá haciendo. Pero el partido no es él.

- ¿Han tratado de convencerle de que no se presentara?
- Pactos no ha habido, conversaciones, sí. He tenido la oferta genérica de «¿no te parece interesante ir juntos para que la ciudadanía vea que hay unidad?», pero creo que una cosa es unidad y otra cosa uniformidad. La lectura de que el partido está fragmentado es falsa.

- Pero los resultados son siempre muy ajustados.
- Eso ocurre también en la derecha. El problema no es si hay dos o tres candidatos, sino que al día siguiente los que han perdido «den le brasa» o que el ganador no tenga la generosidad suficiente para entender que no puede prescindir de la otra parte. Si no gano, no estaré sentado en la ejecutiva, pero colaboraré con el partido dónde me llame.

- Se habla de renovación, pero seguimos hablando de las familias, ¿es hora de pasar página?
- Es imposible mientras se mantenga el sistema de elección mediante delegados. Cada familia controla a una serie de personas afines y es lo que desmarca la tendencia en estos procesos.

- ¿Hay paz interna?
- ¿Pelea interna? Se intuye, pero no la vivo en demasía.

En primera persona
Ricardo Campos es jefe de la sección de Oftalmología en el Hospital General de Valencia y profesor asociado en la Universitat de València. Apoyado por la plataforma Esperanza Socialista, opta hoy a la secretaría general del PSPV de la ciudad de Valencia.