Barcelona

Pujol exculpa a CDC del desfalco del Palau por falta de pruebas

La oposición no acepta sus argumentos y sostiene que hay «demasiadas casualidades»

Pujol exculpa a CDC del desfalco del Palau por falta de pruebas
Pujol exculpa a CDC del desfalco del Palau por falta de pruebaslarazon

BARCELONA- Quizás más ojeroso de lo habitual, pero con la convicción y firmeza de siempre, Oriol Pujol defendió ayer ante el Parlament su nombre y el de Convergencia Democràtica de Catalunya (CDC) de las presuntas tramas de corrupción a las que se les vincula. El secretario general de CDC no se complicó a la hora de exponer los argumentos con los que exculpar a su partido del «caso Palau». Igual que hicieron sus compañeros hace dos años, durante la comisión de investigación parlamentaria, y ahora que el juez instructor, Josep Maria Pijoan, ha vuelto a sentar a Convergència en el banquillo de los sospechosos, Pujol aseguró que «CDC nunca se ha lucrado ni de la Fundació del Palau de la Música ni de la Asociación Orfeó Català». Lo dijo sin titubear, alegando que no hay pruebas ni indicios que impliquen a Convergència en el desfalco del Palau.

Pujol compareció de «motu propio» a petición de ERC. «Utilizaremos todos los mecanismos que estén en nuestras manos para defender la honorabilidad de CDC», subrayó. Pero lo cierto es que «a priori», quien tenía que comparecer era Artur Mas, o eso intentaron PSC, PP, ICV, SI y C's, pero no se salieron con la suya.

«Es una farsa»
La semana pasada, después de que el juez impusiera a CDC una fianza de 3,2 millones de euros como «responsable civil a título lucrativo» del expolio del Palau, la oposición quería que Mas diera explicaciones ante la comisión de Asuntos Institucionales del Parlament. Pero ERC lo impidió. A cambio, reclamó la comparecencia de Pujol. En señal de protesta, el PSC renunció ayer hacer preguntas. «Esta comparecencia es una farsa», alegó el socialista Jordi Terrades. El resto prefirió no desaprovechar la ocasión para trasladar a Pujol que no se cree sus argumentos. A CDC se le acusa de financiarse ilegalmente con comisiones pagadas por empresas a cambio de adjudicaciones con el Palau de intermediario.

El secretario general de CDC, además de dar explicaciones ante el Parlament, envió una carta al juez donde recurre la fianza de 3,2 millones de euros. Defiende que no hay indicios documentados contra Convergència; cuestiona la existencia de «delito», y pone en duda que haya una víctima. Adjunta un escrito donde la Fundación Orfeó Català-Palau de la Música y la Asociación Orfeó Català exponen que «no tiene nada que exigir» a CDC, con la que pretende alegar que «si no hay víctima, el juez debe dejar sin efecto la declaración de responsable civil y tiene que devolver la fianza».

Pujol se defendió que de los 982.583 millones que «se dice» que llegaron a CDC a través de empresas que facturaban en el Palau, admite que su partido nunca ha escondido que recibió 775.000 euros en forma de donaciones a la fundación de Convergència. Sin embargo, asegura que no hay ningún indicio de que cobrasen los otros 200.000 euros.

Los argumentos de Pujol no convencieron a la oposición, que ve demasiadas «casualidades». Por ejemplo, que las donaciones de la empresa Ferrovial al Orfeó Català coinciden en el tiempo con adjudicaciones –la L9 de Metro o la Ciutat de la Justícia–. Es más, las donaciones suponen un 4 por ciento del coste de la obra adjudicada a Ferrovial. El PP sospecha que un 2,5 por ciento iba a CDC y un 1,5 para el intermediario, Fèlix Millet. CiU acusó a la oposición de ver fantasmas.

«Ni soy colaborador, ni necesario en el caso de las ITV»
Barcelona- La comparecencia del secretario de CDC, Oriol Pujol, coincidió con la publicación de unos informes de la Agencia Tributaria que lo sitúan como «impulsor» y «accionista» indirecto de la trama que pretendía lograr de manera fraudulenta la adjudicación de estaciones de ITV. Con un tono seguro y contundente afirmó que «ni soy colaborador, ni soy necesario, ni he montado ninguna empresa de ITV», como señala Hacienda. La oposición reclamó a Pujol que diera algún tipo de explicación sobre la presunta trama de corrupción con la que se relaciona y el secretario general no desaprovechó la oportunidad para defender su honor. Empezó desvinculando a su partido, «CDC no tiene ninguna relación con el caso de las ITV», aseguró. «Y esto también vale para mí y para mi honor», añadió. Tras admitir que conoce a los empresarios imputados, lamentó que se haya utilizado su nombre y «se haya hablado inadecuadamente de mí». Es más, advirtió que por el cargo que ocupa se relaciona con muchos empresarios y advirtió a los otros diputados de que «esto le puede pasar a cualquiera de ustedes». El portavoz de CiU en el Parlament, Jordi Turull, vinculó la información al impulso del pacto fiscal. La oposición le llamó paranoico.