Londres

Una hipoteca puede acabar con una fundación de Carlos de Inglaterra

El príncipe de Gales, Carlos de Inglaterra, ha puesto en peligro el futuro de la fundación con fines benéficos que ha creado por culpa de un negocio inmobiliario, según el periódico The Times.

El heredero del trono británico tomó en 2007 un préstamo de 20 millones de libras (24 millones de euros) para financiar la compra para el Estado de una histórica mansión llamada Dumfries House, en Ayrshire (Escocia).

Aunque no puede haber duda alguna sobre la integridad personal del príncipe de Gales o sus asesores, señala el periódico, la compra por 43 millones de libras (51,6 millones de euros) de dicha mansión ha dejado a su fundación benéfica con una enorme deuda.

Carlos de Inglaterra compró la casa al marques de Bute sin haberla visto antes y, según reconoció anoche su secretario privado, Michael Peat, en un comunicado, el negocio se torció en parte: "No tuvimos suerte. No previmos la crisis del sector inmobiliario".

Un portavoz de Clarence House, residencia del príncipe de Gales, reconoció que éste se arriesgó al solicitar un crédito de 20 millones de libras para financiar la adquisición de Dumfries House.

"La cuestión no era sólo el valor de los terrenos sino si la fundación obtendría permiso para edificar allí. Pero su Alteza Real estaba decidido a que ese importante y maravilloso activo no se perdiera para futuras generaciones", explicó el portavoz.

Con su compra, el príncipe de Gales pretendía entre otras cosas impedir que el marqués propietario la vendiese a otras personas y la importante colección de muebles antiguos que contiene se subastase en Christie's.

El aristócrata también vendió los terrenos agrícolas circundantes como parte de la misma operación y en ellos Carlos de Inglaterra proyectaba construir un poblado modélico, cuyo desarrollo habría servido para recuperar el dinero invertido.

Pero desde entonces, el precio de esos terrenos ha caído a menos de 9 millones de libras (10,8 millones de euros) y la fundación del Príncipe tiene un déficit de 4 millones de libras (4,8 millones de euros).

Un portavoz de Carlos de Inglaterra comentó al respecto: "El Príncipe es un empresario del sector benéfico, y los empresarios tienen riesgos aunque éstos se midan y gestionen. El que actualmente esos terrenos valgan 8 millones es irrelevante. Lo importante es el valor que tengan cuando se vendan y creemos que va a aumentar el precio de los terrenos".