Cataluña

Las minorías del Congreso buscan alternativas a un grupo Mixto sobrecargado

Si se aplicara el Reglamento del Congreso a rajatabla, cosa que no ha ocurrido en casi ninguna legislatura, el grupo Mixto estaría conformado en esta X Legislatura por 24 diputados procedentes de nueve partidos; para evitarlo, las fuerzas minoritarias buscan fórmulas que eviten esta situación.

Mientras esperan a conocer la posición de la Mesa respecto a la conformación de grupos, los más afines se plantean en caso extremo reunirse provisionalmente para lograr los 15 diputados necesarios para tener grupo propio y más tarde separarse en dos formaciones.

El problema de la "sobrecarga"en el grupo Mixto, a donde van a parar aquellos diputados que no han podido formar grupo, se ha generado porque la coalición abertzale Amaiur y el partido de Rosa Díez, UPyD, se han quedado a las puertas de cumplir todos los requisitos.

Amaiur obtuvo siete diputados, uno de ellos por Navarra, y en esta circunscripción no llegó al 15 por ciento de votos exigido para formar grupo, aunque se quedó muy cerca, a 0,14 puntos.

En el caso de UPyD, con cinco escaños que suponen el mínimo justo para tener un grupo, como obtuvo el 4,69 por ciento de sufragios en toda España, no llega al mínimo del 5 por ciento nacional.

Estas formaciones remarcan que hay precedentes suficientes en la vida parlamentaria para justificar una lectura flexible del Reglamento a su favor, teniendo en cuenta que ambos cumplen con el umbral de los cinco diputados.

Como en el caso de Amaiur el problema estriba en su porcentaje de Navarra, cabría esgrimir como porcentaje la media entre las tres provincias vascas y Navarra, que sí supera el 15 por ciento; también se baraja no acreditar ahora al diputado navarro e incorporarlo después cuando el grupo esté en marcha.

Es la Mesa de la Cámara Baja, como órgano de gobierno del Congreso, quien debe decidir cómo aplica el Reglamento, y por tanto será el PP quien tenga la última palabra, ya que su mayoría absoluta le garantiza disponer también de mayoría en la Mesa.

Las tretas que se han utilizado en el pasado para dar grupo a las minorías son muy diversas, desde la cesión temporal de diputados hasta el recálculo de los porcentajes obtenidos para aplicar el más beneficioso; tampoco ha sido obstáculo no llegar por décimas a ese porcentaje.

Lo que sí tienen presentes todos es la doctrina del Tribunal Constitucional, que reconoce a la Mesa plenas facultades para interpretar el Reglamento.

Entre tanto, en el PP hay voces que públicamente se pronuncian en contra de permitir el grupo de Amaiur, como su diputado por Álava Alfonso Alonso, aunque también fuentes del partido reconocen que los precedentes avalarían lo contrario.

Y Rosa Díez quiere argumentar ante la Mesa que no es "vendible"que a su fuerza política, con más de 1.140.000 votos en toda España se le niegue un grupo propio mientras CiU, con 1.014.000 votos en Cataluña sí disponga del suyo.

Amaiur y UPyD, aunque con postulados ideológicos muy distintos, están recibiendo el respaldo de las restantes formaciones minoritarias.

Es el caso de IU y PNV, que tienen garantizado su grupo, y de las formaciones que teóricamente irán a parar al Mixto, que temen la posibilidad de compartirlo con un número muy elevado de diputados.

Porque si no hay flexibilidad para Amaiur y UPyD, en el grupo Mixto estarán, además de los doce diputados que suman ambos, otros doce procedentes de las restantes minorías, lo cual restringiría al máximo sus recursos y los tiempos en los turnos de portavoces.

Serían tres de ERC, dos del BNG, dos de Coalición Canaria, uno de Geroa Bai, otro de Compromís, uno más de Foro Asturias y dos de UPN, que pese a haber concurrido con el PP en Navarra prefiere estar en el Mixto.