Probióticos

El término probiótico es una palabra de origen griego que significa «a favor de la vida». De acuerdo con la definición adoptada por la FAO/OMS, los probióticos son «microorganismos vivos los cuales, al ser administrados en cantidades adecuadas, confieren efectos beneficiosos en la salud del huésped». En un estudio reciente realizado en mujeres pre y postmenopáusicas se estudiaron las cepas de Lactobacilos presentes en la mucosa vaginal, encontrándose como predominantes las siguientes especies: L.iners, L. crispatus, L. gasseri, L. jenesenii, seguido de L. acidophilus, L. fermentum, L. plantarum, L. brevis, L. casei, L. vaginalis, L. delbrueckii, L. salivarius, L. reuteri, y L. rhamnosus. Mediante la producción de ácido láctico, los lactobacilos mantienen un nivel de pH óptimo en el entorno vaginal, inhibiendo de manera natural el crecimiento de microorganismos no deseados. Los Lactobacilos son descritos como microorganismos probióticos utilizados para restablecer el equilibrio ecológico de la vagina. Juegan un importante papel en la defensa del huésped al mantener un equilibrio con los otros microorganismos habituales y contribuir al mantenimiento del pH. Se ha demostrado que la ausencia de lactobacilos disminuye la defensa de la vagina, siendo más frecuentes las infecciónes vaginales.
Y eso es lo que hace el probiótico que contiene dos cepas de lactoibalillus (rhamnosus y el gasseri). Según el estudio de Petricevic, donde se evaluó la influencia de la administración de dos cepas probióticas de Lactobacillus sobre la calidad de la flora vaginal en mujeres postmenopáusicas, se sugiere que las cápsulas con probióticos pueden ser una ayuda útil para aumentar la calidad y la mejora de la flora urogenital. Seguro.