Los chaparrones de agosto azotan el litoral de Tarragona y Barcelona

Barcelona- Dentro de un agosto atípico y poco veraniego, las lluvias volvieron a azotar ayer buena parte de Cataluña, especialmente el litoral de Tarragona y Barcelona, y también las comarcas del Vallès. Pese a que no se registraron incidentes graves, los Bomberos de la Generalitat recibieron hasta las 19.00 horas más de 150 avisos por inundaciones de bajos y vías de acceso.
Según los Bomberos, los chaparrones, típicos del mes de agosto, cayeron con fuerza e indundaron plantas bajas, sótanos, garajes y vías de accesos. En un primer momento, las lluvias descargaron con fuerza en las Tierras del Ebro y el Camp de Tarragona y posteriormente se desplazaron hacia las comarcas de Barcelona, concretamente la Anoia, el Vallès Oriental y el Vallès Occidental.
La lluvia también provocó afectaciones en la red viaria, de forma que en la AP–7 se registraron siete kilómetros de retención entre Martorell y Castellbisbal. Además, entre las 17.00 y las 18.50 horas permanecieron cortadas la N–340 en Altafulla, la T–210 en Torredembarra y la C–31 en Cunit.
Durante el mediodía y primera hora de la tarde también hubo poca visibilidad por la lluvia en la AP–7, entre Tarragona y Castellbisbal y entre Cerdanyola y Mollet, así como en la N–340, entre Tarragona y Vilafranca del Penedès.