Los incendios forestales dejan más de mil hectáreas quemadas

El delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Avila ha declarado a las 13.30 horas de este domingo el nivel 2 del Plan de Emergencias ante Incendios Forestales de Castilla y León (Infocal) en el incendio que afecta desde el pasado viernes al término municipal de Navalacruz y donde trabajan efectivos de Madrid.

En concreto y según ha informado la Junta, desde la Agencia de Protección Civil se ha activado la Unidad Militar de Emergencias para colaborar en las tareas de extinción del incendio que afecta a los montes de la Sierra de Gredos.

En total se sumarán a los medios de Medio Ambiente que trabajan desde el viernes en Navalacruz cien efectivos de la Unidad Militar de Emergencias: 50 procedentes de Madrid y 50 procedentes de León. Asimismo, la Agencia de Protección Civil ha enviado dos técnicos de Protección Civil y una Unidad de Apoyo Logístico en Emergencias (UALE) compuesta por puesto de mando avanzado, un vehículo Unimog, dos vehículos ligeros y tres miembros de la Unidad de Apoyo Logístico.

Con la incorporación de los cien efectivos de la UME son ya casi 400 las personas que trabajan en las tareas de extinción del incendio procedentes no sólo de Avila sino de varias provincias, como Segovia, Salamanca, León, Madrid, Valladolid o Cáceres, y pertenecientes tanto a la Junta de Castilla y León como a los ministerios de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) y Defensa.

El fuego permanece activo y ha quemado ya más de 500 hectáreas, en su mayor parte de monte bajo de matorral y pastos, aunque un frente ha entrado en una masa arbolada.

Según ha informado la Consejería de Fomento y Medio Ambiente en un comunicado, trabajan en el terreno 15 cuadrillas de tierra, 5 brigadas BRIF y otras 7 helitransportadas, 2 bulldozer, 3 autobombas, 4 hidroaviones, 8 helicópteros de extinción y uno de coordinación, con la dirección de 11 agentes medioambientales y 10 técnicos de la Junta, además de haberse solicitado la intervención de la UME del Ministerio de Defensa. El incendio se originó a las 19.35 del viernes, día 18 de agosto, en las inmediaciones del pueblo de Navalacruz debido a causas humanas, posiblemente por una negligencia, según parecen apuntar las primeras investigaciones.

Según ha reconocido la Junta, lo escabroso del terreno y la pedregosidad dificultó desde un primer momento los trabajos de extinción, "por lo que pese a los numerosos medios desplegados desde su inicio, a las 23.40 de ese mismo día se declaró el nivel 1 de alerta".

Tras los trabajos de esa noche, a las 7.45 horas del sábado el incendio se dio por controlado, aunque no extinguido, y continuaron durante todo el día el trabajo de remate de varios medios de extinción. Sin embargo, la inestabilidad atmosférica desencadenó diversas tormentas con fuertes y cambiantes vientos que reactivaron las llamas en gran parte del frente hacia las 15.10 horas.

Por este motivo y según han relatado las mismas fuentes, nuevos medios se dirigieron al incendio que había adoptado una "inusitada virulencia"y continuaba su progreso hacia el norte, "y donde el humo intenso y las tormentas dificultaban el apoyo de los medios aéreos, hasta el punto que algunos de ellos se vieron forzados a abandonar la zona o no pudieron regresar a ella tras haber ido a sus bases a repostar".

Los medios de la Junta, entre los que se encontraban tres helicópteros con sus dotaciones de personal técnicos y numerosas cuadrillas de tierra, contaron con el auxilio de los medios del MARM (4 hidroaviones procedentes de Salamanca y Madrid, así como 3 brigadas BRIF procedentes de Avila, Toledo y Cáceres) y de la Comunidad de Madrid, que aportó dos helicópteros más.

Los flancos seguían amenazando las áreas cercanas a Navalacruz, pero la cabeza del incendio continuó avanzando hacia el norte, fuera de la capacidad de extinción de los medios, y al caer la noche alcanzó los montes cercanos al Puerto de Menga.

Controlado el fuego en Atamaría
La Consejería de Presidencia de Murcia da oficialmente por controlado el incendio forestal que desde el viernes permanecía activo en la Sierra de Atamaría y el Parque Regional de Calblanque, Monte de las Cenizas y Peña del Águila. A lo largo de un perímetro de 20 kilómetros han ardido unas 420 hectáreas, de las que 328 pertenecen a la Red Natura 2000, sin que se haya visto afectada ninguna zona especial de protección de aves (ZEPA).

Tras mantener hoy una reunión con los técnicos de los distintos servicios de emergencias que actúan en la zona, el consejero de Presidencia, Manuel Campos, resaltó que "gracias a un amplio dispositivo contra el fuego se han podido controlar las llamas en un tiempo prudencial".

La previsión es que el fuego no afecte a más superficie forestal, dado que está controlado tanto en el perímetro como en el interior de la zona afectada. Dicha zona "se encuentra bajo la permanente vigilancia y control de los efectivos de extinción", apuntó Campos, quien afirmó que pese a que "la evolución del fuego nos permite ser optimistas de cara a declararlo extinguido próximamente, aún mantenemos la alerta ante pequeños posibles rebrotes".

El titular de Presidencia señaló que el fuego estaba "prácticamente controlado"en las últimas horas, si bien manifestó que factores como la velocidad y dirección del viento, la humedad y las altas temperaturas "exigían ser prudentes antes de declararlo controlado".

A día de hoy, trabajan unas 70 personas para sofocar los últimos puntos calientes localizados en la Sierra de Atamaría y el Parque Regional de Calblanque, Monte de las Cenizas y Peña del Águila.

La Unidad Militar de Emergencia mantiene solo un contingente de veinte soldados del batallón valenciano en tareas de refrigerar el terreno para dar por extinguido este incendio, informó a EFE un portavoz de la UME.

75 hectáreas quemadas en Galicia
La Consellería de Medio Rural ha dado por extinguidos los incendios forestales que durante la jornada de ayer se produjeron en A Fonsagrada (Lugo) y en Vila de Cruces (Pontevedra), que quemaron, en conjunto, unas 75 hectáreas. Además, según apunta el departamento autonómico, permanece activo y controlado desde la medianoche un incendio forestal en Carballo (A Coruña), que ha arrasado unas 25 hectáreas.

El incendio de Vila de Cruces comenzó ayer por la tarde en la parroquia de Asorey y quedó extinguido después de las 22 horas. Según las primeras estimaciones la superficie quemada es de 54 hectáreas, cuarenta de monte raso y catorce de masa arbolada.

Para la extinción del fuego fue precisa la intervención de un técnico, tres agentes, trece brigadas, siete motobombas, dos palas, cinco helicópteros y cinco aviones. En el otro fuego registrado ayer por la tarde, en A Fonsagrada, el fuego quedó extinguido pasadas las 5 horas de hoy y según las primeras estimaciones de Medio Rural ha quemado 20,5 hectáreas de monte raso.

Cuatro helicópteros y seis aviones, además de tres agentes, dieciséis brigadas, dos unidades de vigilancia móvil, ocho motobombas y una pala trabajaron en la extinción del fuego.

Además, continúa activo y controlado un incendio en Carballo, que ha arrasado hasta el momento 12,5 hectáreas de monte raso y 12,5 de masa arbolada. Cinco agentes, siete brigadas, una unidad de vigilancia móvil, ocho motobombas, una pala y dos helicópteros trabajan en la extinción de este incendio.

Desalojos en Palos de la Frontera
Por otra parte, unas 30 personas, residentes en 14 viviendas de la urbanización 'Jardines de la Rábida', de Palos de la Frontera (Huelva), han tenido que ser desalojadas de forma temporal y por prevención en la madrugada de este domingo tras reavivarse las llamas del incendio desatado en dicho enclave en la madrugada del sábado.

De esta manera, según han informado fuentes del servicio unificado de Emergencias 112 Andalucía, el desalojo se produjo alrededor de la 1,00 horas de la madrugada de este domingo, después de que Guardia Civil solicitara a las 23,00 horas la presencia de Bomberos en dicha urbanización onubense tras constatar que se habían reavivado las llamas del fuego del día anterior.

Las mismas fuentes han precisado que el desalojo sólo duró unos minutos, y que la evolución del fuego se vio frenada con la ayuda de la lluvia ha caído esta madrugada en la provincia onubense.

Por último, conviene recordar que este incendio se originó en la madrugada del sábado y, en un principio, obligó a desalojar, también por prevención, a más de 200 personas, residentes en 50 viviendas de la urbanización 'Jardines de la Rábida', hacia la que se desplazaron efectivos de Bomberos, Policía Local, Guardia Civil e Infoca, que dieron por controlado el incendio a las 20,00 horas de este sábado.