Comercios 100% libres

MADRID- Los comercios de la Comunidad de Madrid no sólo tendrán libertad total para elegir los días y las horas que abrirán, también podrán decidir sobre los periodos de rebajas que quieran establecer en sus comercios, así como la duración de las mismas. El Gobierno regional, que dirige Ignacio González (en la imagen), elimina cualquier traba legislativa que impida a un comerciante aplicar rebajas a su mercancía.

Esta libertad de decisión del comerciante se recogerá en la ley de medidas fiscales o administrativas que aprobará hoy el Consejo de Gobierno regional; una ley conocida como el «cajón de sastre» de los presupuestos, por aunar cada año todas las medidas que quedan fuera de la ley de presupuestos (que ya está en su tramitación parlamentaria) y que el Ejecutivo quiere aplicar en el siguiente año y que por tanto debe introducirlas en las cuentas del próximo ejercicio.

La norma con la que, paradójicamente, se «desregularizarán» las reglas que hasta ahora constreñían las rebajas comerciales, permitirá a los comerciantes establecer descuentos sobre los productos que decidan, sin máximos ni mínimos, como hasta ahora. A partir del 1 de enero también se eliminará la prohibición de poner a la venta saldos que no hayan sido puestos a la venta con anterioridad, así como la obligación de informar al público del periodo de vigencia de una promoción.

Esta medida llega después de que el pasado mes de julio, el Gobierno de la nación eliminara la limitación que establecía la Ley de Ordenación del Comercio Minorista de 1996 sobre las rebajas. Hasta entonces sólo podían tener lugar dos veces al año, una coincidiendo con el principio del año (del 1 de enero al 31 de marzo) y otra, en torno a las vacaciones de verano (del 21 de junio hasta el 21 de septiembre). Estos periodos tenían una duración mínima de una semana y máxima de dos meses que correspondía fijar a las comunidades autónomas y que ahora elimina la Comunidad.

Con la liberalización de las rebajas, el Gobierno de González lleva a cabo la liberalización total que inició Esperanza Aguirre con la Ley de Dinamización de la Actividad Comercial que aprobó en julio de este año y que ha permitido a los hosteleros que lo han deseado abrir todos los días del año, sin límite de horario, y que también ha supuesto la supresión de todas las licencias que hasta ese momento eran necesarias para iniciar una actividad comercial. Unas medidas de apoyo hacia aquellos que crean empleo que tendrán continuidad con medidas ya anunciadas como la compensación de las cuotas de la Seguridad Social con hasta 2.880 euros a las pequeñas y medianas empresas (pymes) que generen directamente puestos de trabajo en la región. Unas bonificaciones que hasta ahora se daban a los sindicatos para cursos de formación continua y que ahora se destinarán a emprendedores. Según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa correspondientes al tercer trimestre de 2012, se han creado cerca de 12.000 nuevos puestos de trabajo en el sector comercial con respecto al trimestre anterior, mientras que en el mismo periodo, en Cataluña se han destruido más de 2.000 puestos de trabajo. Además, Madrid sigue siendo una de las regiones donde el empleo en el sector comercial es más estable si se atiende a a que el 82 por ciento de los contratos son indefinidos y un 80% son a tiempo completo, frente al 77 y 75%, respectivamente, que se registran a nivel nacional.

Los impuestos no suben y siguen bonificados
El anteproyecto de ley de medidas fiscales que aprobará hoy el Consejo de Gobierno y que se pondrá en práctica a partir del 1 de enero del próximo año, permitirá a los contribuyentes madrileños disponer de una media de 700 euros más al año frente al resto de ciudadanos. El Ejecutivo regional se mantiene firme en su política fiscal, que inició hace nueve años Esperanza Aguirre, basada en la rebaja de impuestos regionales o en su tramo regional y que, según los cálculos del Gobierno regional, ha permitido ahorrarse a los madrileños 21.500 millones de euros. En concreto, la Comunidad mantiene bonificado el impuesto de Sucesiones, Donaciones, la eliminación de la tributación por Patrimonio y la rebaja de un punto en el tramo autonómico del IRPF, así como las diferentes deducciones en el Impuesto de la Renta, como la deducción por nacimiento o adopción de hijos, por acogimiento de menores, por acogimiento no remunerado de mayores de 65 años o discapacitados. También se mantienen las deducciones por arrendamiento de vivienda habitual para menores de 35 años, la deducción por donativos a fundaciones, por gastos educativos o para familias con 2 o más descendientes e ingresos reducidos. Además, se mantiene la deducción para el fomento del autoempleo de jóvenes menores de 35 años, la deducción por inversión en adquisición de acciones y participaciones sociales de nuevas entidades o de reciente creación, así como por inversiones realizadas en entidades en el Mercado Alternativo Bursátil.