Todas las vidas de Marianne Faithful

«Me ha llevado mucho tiempo conseguir ser buena en los directos. Por eso odio los estadios y los festivales, prefiero los teatros pequeños, porque allí me siento protegida por mi banda», dice en el único asomo de inseguridad de toda la entrevista.Será un show acústico con sus temas de altos vuelos porque Faithful «ha dejado atrás el rock & roll» igual que algunos aspectos de su biografía. «Me he reinventado a mí misma», asegura la artista, que fue musa y amante de Mick Jagger, líder de los Rolling Stones, con el que debutó en la música interpretando «As tears go by», que Jagger compuso con Keith Richards. Tras romper con el «stone», su vida dio algunos tumbos por el consumo de drogas, hasta que en 1979 retomó su carrera musical con «Broken english», un álbum que gozó de todos los parabienes de la crítica. Como el último, que presenta mañana. «No estoy cansada de la imagen de aquellos años, aunque todo el mundo me pregunte por ella, sencillamente porque ya no la tengo. Se ha ido. Soy otra persona», insiste. Sigue incombustible con su nuevo lema: «La inspiración me viene de la buena saud y de la felicidad», dice tras una pausa para dar una calada a un cigarrillo, que no abandona a pesar de haber superado un cáncer, que ahora, una vez se ha ido, considera una parte más de sí misma: «Mis experiencias me han hecho como soy, pero no podría señalar nada como lo más importante». Tampoco muestra arrepentimiento: «No cambiaría nada, aunque me parece que fue una pérdida de tiempo tomar drogas. aunque como no puedo cambiarlo, tampoco quiero. Es una parte importante de mi vida y de mi historia». Se decidió a contarlo todo en su biografía hace unos años. «Creo que fue una buena idea explicar las cosas desde mi punto de vista. Pero no lo hice por razones psicológicas, sino para ganar dinero y divertir a la gente», asegura. Lo que ahora importa a la actriz y cantante es «levantarse por la mañana, trabajar, divertirme, y volver a la cama». Ahora, musa «indie»Que el mito vive una segunda juventud es fácil de comprobar desde que en 2005 publicara «Before the poison», un espléndido álbum que compusieron con ella el líder de Blur, Damon Albarn, y Nick Cave, otro de los artistas de culto para las jóvenes generaciones. A ese álbum se sumaron nada menos que Jarvis Cocker y PJ Harvey, e incluso el esquivo y moderno Beck.Y en ese afán por reinventarse con estilo retomó su temprana carrera de actriz con un personaje intenso y excesivo, como le gustan las cosas a ella, en «Maria Antonieta» (Sofia Coppola, 2004) y después el papel protagonista en «Irina Palm», sobre una viuda madura que ha de trabajar en un club de alterne para pagar un tratamiento médico a su nieto. «Amo mi carrera como intérprete y saldrán dos películas más este año. No puedo contar nada, pero me sirve para seguir creando», dice mientras echa el humo de su cigarro. Hasta que el cuerpo aguante.Baronesa MasochPor sus maneras, Marianne Faithful desprende aristocracia, y no es sólo una cuestión de actitud. Es descendiente del escritor austriaco Leopold Von Sacher-Masoch, autor de la obra «La Venus de las pieles», que escandalizó a la sociedad de su época por las descripciones de unas apetencias afectivas bastante particulares de un protagonista autobiográfico: hacerse azotar y ser humillado por una mujer corpulenta vestida con pieles. Casi todas las novelas que escribió este aristócrata reflejaban dichas prácticas, por lo que de su apellido Masoch derivó el término «masoquista». Faithful ostenta el título de baronesa.l DÓNDE: Madrid. Escenario Puerta del Ángel. Los Veranos de la Villa. l CUÁNDO: hoy, a las 21:30 horas.l CUÁNtO: entre 20 y 40 euros.