La FEB quiere derruir el Auditorio para levantar un pabellón de baloncesto

SEVILLA- «Tienen que darme una solución en cuanto al concepto de las instalaciones, dónde irán y, sobre todo, plazos y planes del proyecto». La Federación Española de Baloncesto (FEB) ya comienza a impacientarse por la indecisión del Ayuntamiento, que aún divaga sobre dónde se ubicará el futuro pabellón multiusos para albergar el Mundial de baloncesto de 2014, del que Sevilla será sede junto a Bilbao, Las Palmas, Granada y Madrid –donde se jugará la fase final–. Hasta ahora, el máximo mandatario del baloncesto español, José Luis Sáez, había mantenido al margen sus preferencias respecto a la situación de la infraestructura, exponiendo únicamente su deseo de que «se integre en la ciudad» y no se repita el «error» del Estadio Olímpico.

Catorce meses después de que España se alzara con la organización,y con la próxima reunión prevista para septiembre, Sáez quiere empezar a controlar los «tempos». En su día , ya expresó su deseo de que todo estuviera dispuesto con un año de antelación. Para cumplir su previsión, fija diciembre de 2010 como fecha límite para zanjar las cuestiones más importantes: dónde se levantará la infraestructura, quién la financiará y cuáles serán las condiciones de explotación. «Los plazos son complicados pero asumibles todavía», asegura a LA RAZÓN de Sevilla, Ante la inacción del Gobierno local, Sáez ya ha dejado caer su primera propuesta: que el pabellón no sea fruto de la adaptación del auditorio municipal Rocío Jurado.

El máximo mandatario del baloncesto español –que en estos momentos se encuentra volcado en la preparación del Mundial que se disputará desde el 28 de agosto en Turquía, que dará el relevo al de España–, tiene claro que la parcela es idónea por su ubicación y posibilidades de desarrollo pero discrepa de la idea municipal. «En principio me gustaba el Auditorio, la Cartuja o los Bermejales porque están integradas en la ciudad, pero la reforma propuesta es bastante complicada. El Auditorio se está cayendo y sería muy importante hacer una reflexión sobre ello», mantiene.

En su opinión, «no está como se merece. Yo he tenido la oportunidad de dar un paseo por la instalación completa y no es desde luego lo que los sevillanos hubiéramos proyectado como edificio emblemático de la Expo».

Para Sáez, la parcela «es reutilizable. Es muy bonita y el sitio es un lugar para crear riqueza, no para dar un concierto cada tres meses –critica–. El problema es saber si ése es el grado de utilización que se le quiere dar».
 
En cuanto a los plazos, admite que «ha habido una situación económica un poquito difícil y entendemos que se retrasará», pero insiste en que «tienen que cumplir dentro del año y cumplir con las expectativas».

Desde el Ayuntamiento se insiste en que aún restan cuatro años pero la situación no avanza. Desde el principio, determinó que su participación se limitaría a ceder los terrenos, mientras que la financiación deberá correr a cargo de capital privado –beneficiándose de la posterior explotación–. Ese aspecto es el que se está negociando actualmente, sin que hayan fructificado las conversaciones con dos grandes grupos internacionales, como admitió el director de la Oficina local de Relaciones Exteriores, Alfonso Seoane.

La exigencia del presidente de la FEB no impide que reconozca el «compromiso» de todas las fuerzas políticas municipales. En ese sentido, cree que el año electoral servirá de «impulso» para un proyecto importante para la ciudad. Ante la hipótesis de que finalmente la ciudad tuviera que retirarse –pese a que ya aportó el canon que exige la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) para optar a ser sede–, zanja: «Quiero que esté Sevilla en el Mundial, siempre ha cumplido».