Caso Campeón

«Pepe me preguntó a qué tope podían llegar y le dije que a 65»

Las grabaciones a un empresario dejan a Blanco en una situación difícil 

«Pepe me preguntó a qué tope podían llegar y le dije que a 6,5»
«Pepe me preguntó a qué tope podían llegar y le dije que a 6,5»larazon

MADRID- Las conversaciones interceptadas al empresario José Antonio Orozco, a quien la jueza de Lugo Estela San José incluye entre los empresarios que, presuntamente, constituyeron sociedades con las que recibieron «subvenciones y préstamos obtenidos de manera ilícita», aluden de manera más o menos sutil a una participación del ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco, en labores de, cuanto menos, mediación de distintas operaciones empresariales. De hecho, el empresario Jorge Dorribo, principal implicado en la «operación Campeón», aseguró en dos comparecencias ante la magistrada los días 8 y 13 de agosto, que el ministro percibió 400.000 euros en comisiones, lo que el afectado ha rechazado de forma tajante.

Las últimas conversaciones telefónicas de Orozco y sms entre éste y Blanco, que incluye la jueza en la exposición razonada que remitió al Tribunal Supremo, comienzan con un mensaje, el 16 de febrero, en el que el empresario informa al ministro que le ha enviado dos correos electrónicos, «uno sobre San Boi –relacionado con el interés de la empresa Azkar de construir una nave cerca del aeropuerto de El Prat-–y otro sobre Alvedro (Grafloplás) –empresa dedicada a la fabricación y venta de artículos de oficina y papelería–. ¿Los pudistes ver? Gracias y un abrazo». Apenas dos minutos más tarde, José Blanco le confirma que los ha recibido que le llamará al día siguiente.

«Ya son ocho millones»

Sin solución de continuidad, Orozco llama por teléfono a «Rafa» y le informa de los mensajes cruzados con Blanco. En un momento determinado, «Rafa» le comenta a su interlocutor que «le da la impresión de que están forzando demasiado la máquina, que (si) se llegó a un acuerdo del seis y medio, impuestos aparte», a lo que el empresario le contestó que eso era «muy bueno, que ya son ocho millones».

El día siguiente, Orozco, poco después de recibir una llamada de Blanco en la que le asegura que «en 15 días está resuelto lo de Cataluña», vuelve a contactar con «Rafa» y le manifiesta que «lo llamó este hombre –sin citar de forma expresa a nadie– y le dijo que eso está muy por encima de lo razonable y más que eso no se puede dar, pero lo que sí puede es dejarlo fuera», a lo el propio empresario le contestó: «No Pepe, que cierren el asunto y ya está». En esa línea, Orozco le dice a «Rafa» que lo que no pueden hacer ahora es «retirar la oferta que les habían hecho», y que, en ese supuesto, «habría que volver a hablar con este hombre». La jueza señala, que, «presuntamente, se refiere a José Blanco López».

El 18 de febrero aparece en escena un nuevo personaje en toda esta trama: «Ramón», quien también recibe una llamada telefónica de José Antonio Orozco, el cual le expresa que «a él, Pepe le preguntó a qué tope podían llegar y él (Orozco) le dijo a que seis con cinco más impuestos». Ante ello, «Ramón» le contestó: «Vale, después charlamos y firmamos, y a ver cuándo hay que ir a Madrid, que no se puede rascar más». La conversación finaliza con la intervención, reveladora como las anteriores, de Orozco, quien le manifiesta que «Pepe le dijo que no hay más, que mañana lo va a llamar y le dice que eso es lo que hay».

Dos llamadas comprometidas
- 16 de febrero de 2011. 19:47:44 horas. El empresario José Antonio Orozco llama a «Rafa», quien le expresa su opinión de que «están forzando demasiado la máquina, que (si) se llegó a un acuerdo del 6,5, impuestos aparte».

- 18 de febrero de 2011. 19:19:38 horas. Orozco y «Ramón» hablan de la «negociación» en cuestión –que no se cita en ningún momento– y el primero le comenta que «Pepe le preguntó a qué tope podían llegar y él (Orozco) le dijo que a seis con cinco más impuestos». Su interlocutor le dio el OK porque «no se puede rescar más».