Rajoy: «Corremos el riesgo de que nos tomen por el pito del sereno»

Pese a tener el viento a favor, Rajoy, sin embargo, no fue a morder en la yugular de Rodríguez Zapatero, quizás, como ocurrió ya con Marruecos, porque volvió a primar su condición de candidato a La Moncloa y la posibilidad de que en un futuro muy próximo pueda ser él quien administre las delicadas relaciones con el caudillo bolivariano. «Corremos el riesgo de que se nos tome por el pito del sereno», fue su advertencia cuando se acumulan los datos policiales y judiciales que avalan la tesis de las supuestas conexiones Chavez-ETA-FARC. Siete meses después de que esté en vigor un auto judicial que exige la extradición del etarra Arturo Cubillas, alto cargo del Gobierno venezolano, y una vez que el Ejecutivo se da por satisfecho con que éste abra una «investigación» sobre la situación en la que se encuentra ese etarra procesado, Rajoy advirtió de que se está ante un asunto de «enorme importancia». El líder del PP vasco, Antonio Basagoiti, acusó ayer al presidente del Gobierno de reaccionar con «debilidad y flojera» ante Chávez. «Lo hace porque es amigo de Chávez y por el petróleo», concluyó.