Arsenal

Ganó Drogba por Julián García Candau

La Razón
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Un cabezazo medio fallido de Müller y un cante de Cech dieron la Liga de Campeones al Bayern de Múnich, pero sólo por unos minutos. Un cabezazo magnífico, espectacular, de Drogba hizo el empate, con lo que llegó la prórroga. En ella Cech le paró un penalti a Robben que le habían hecho a Ribéry, casi idéntico el padecido por Torres, pero que no fue señalado. En los penaltis definitivos el tiro decisivo lo lanzó Drogba e hizo campeón al Chelsea, equipo que no mereció ganar y que tampoco hizo méritos suficientes para eliminar a Nápoles, Benfica y Barcelona. Pero como dijo Boskov, «fútbol es fútbol». Este partido ya lo habíamos visto. Un equipo lanzado al ataque, el Bayern, y otro dedicado a defenderse, el Chelsea. La posesión de balón con más del sesenta por ciento a favor del equipo muniqués. Las mejores ocasiones de gol y las más claras, también fueron del conjunto alemán. Mata estuvo media hora del que no se pudo decir que había desaparecido en combate porque no había entrado en él. Cuando el Chelsea se hizo un poco el ánimo y se estiró, el asturiano dio los mejores pases de su equipo.

El juego muniqués fue más constante en el ataque, aunque tampoco se distinguió por toques delicados. Su centro del campo no fue creador. El partido estaba visto porque el equipo londinense casi se limitó a aguantar el paso del tiempo. Era como si desde el comienzo ya estuviera optando por los lanzamientos de penaltis. Drogba cortó y despejó balones como un defensor.
A medida que fue consumiéndose el partido, la melancolía creció. Fue inevitable lamentarse por el hecho de que Cristiano no hubiera «fusilado» a Neuer y Messi a Cech.