La BBK no dará trato preferente a la Iglesia y modificará la obra social

La Iglesia, el Cabildo Catedralicio de Córdoba en concreto como entidad fundadora, no recibirá ningún trato preferente por parte de la BBK una vez que la caja vizcaína se haga con el control definitivo de Cajasur. No tendrá representación en ningún órgano de gobierno de la entidad y tampoco estará presente en la nueva fundación con sede en Córdoba que gestionará la obra social y cultural. «No me incluyo en el grupo de creyentes», dijo de forma rotunda el presidente de la BBK, Mario Fernández.El presidente de la entidad con sede en Bilbao estuvo ayer en Sevilla para explicarle al presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, el modelo de negocio que quiere implantar en Cajasur. No estuvo en Córdoba porque el procedimiento administrativo de adjudicación por parte del Banco de España aún no ha concluido y aún permanece bajo el control de los administradores judiciales. Fernández quiso trasladar un mensaje de tranquilidad al Gobierno andaluz: «Cajasur va a seguir existiendo en Andalucía» o «nosotros venimos a invertir» fueron algunas de sus frases más repetidas. Pero también dejó claro cuáles serán las premisas: impondrán el modelo exitoso de la BBK que les ha llevado a ser la caja más solvente de España según los recientes test de estrés realizados por la Unión Europea. Para ello, el ajuste laboral será necesario. «Sería estúpido negarlo», afirmó Fernández. Sin embargo, aún no existe una hoja de ruta cerrada, a la espera de tomar posesión efectiva de la caja cordobesa. Unicaja, durante la negociación previa a la intervención, planteó 564 despidos –a los que habría añadir 221 del holding empresarial–. El presidente de la BBK también aseguró que se analizarán todas las empresas participadas por Cajasur y que tendrán especial celo con las «vinculadas al ladrillo», uno de los negocios que arrastró a la entidad a la bancarrota –un 28 por ciento de su cartera crediticia se centró en este sector en 2009–. En cuanto a la obra social, la BBK creará una fundación con sede en Córdoba y mantendrá la inversión ya comprometida. En los próximos años, la reorientará hacia la inclusión social, cultura, juventud y microcréditos. También confirmó que la red de oficinas de Cajasur en Andalucía y «posiblemente en Extremadura» –441 y 15 respectivamente– mantendrán la misma marca comercial –incluso la misma imagen corporativa–, a las que se sumarán las 31 sucursales con las que cuenta la BBK en la región. Arenas: «El que es amigo de Chaves, de Salgado y de Mafo es Griñán»El presidente del PP-A, Javier Arenas, salió ayer al paso de las declaraciones del vicesecretario general del PSOE-A, Rafael Velasco, quien aseguró el domingo que «el Partido Popular presionó al Banco de España para que Cajasur se fuera de Córdoba», al tiempo que retó a esta formación a que lo denuncien, ya que cuenta con «testigos» para demostrarlo ante los tribunales. Unas declaraciones que, por cierto, fueron ayer suscritas por la secretaria de Organización del PSOE-A, Susana Díaz.Arenas volvió a pedir «más peso social y menos peso político» para la cajas de ahorros y recordó, al hilo de la denuncia de los socialistas, que «quien es íntimo amigo de Manuel Chaves, de la vicepresidenta Salgado y de Mafo (Miguel Ángel Fernández Ordóñez, el gobernador del Banco de España) es Griñán». No hay que olvidar que fue el propio presidente de la Junta el que reconoció en un pleno del Parlamento que mientras Arenas se reunía con los interventores del Frob, él hablaba directamente con Fernández Ordóñez.