San Blas

Las cuentas de Gómez en la picota

- Cada vez son más las voces en el PSM que cuestionan la labor del líder- Ha echado a nueve empleados, pero paga 156.000 euros de alquiler en Callao 

Muchos de los gastos de Gómez han levantado ampollas entre los socialistas
Muchos de los gastos de Gómez han levantado ampollas entre los socialistaslarazon

 Los malos resultados cosechados en las urnas no han tenido más respuesta por parte de su líder, Tomás Gómez, que la de echar a la calle e incorporar a las listas del INEM a nueve empleados. Mientras sus rivales dudan de la capacidad del socialista para poner en marcha los 150.000 empleos que anunció durante la campaña electoral, sus críticos dentro del Partido Socialista de Madrid (PSM) no hacen otra cosa que tirar de calculadora. Menos ayuntamientos, menos concejales, menos diputados... Las cuentas no cuadran en la dirección socialista madrileña y, tras conocerse que la dirección federal está echando una mano a Gómez para cubrir agujeros, ya son numerosas las voces que piden cambios drásticos para evitar que el partido vaya a pique definitivamente. Preguntado por este asunto, ayer Gómez volvió a optar por la huída hacia adelante: «El dinero va destinado a pagar el sueldo de las plantillas», explicó en un acto en Santos de la Humosa tras apuntar a la decisión de la Asamblea de reducir las asignaciones de los grupos parlamentarios como una de las fuentes de sus problemas de liquidez.

Sin quitar importancia a este foco de ingresos, fuentes socialistas consultadas por LA RAZÓN quisieron ayer apuntar a otros motivos como los causantes de la «quiebra» socialista. Uno de los gastos que más escuece a parte de la militancia del PSM es el cambio de sede. El PSM se mudó a Callao en diciembre del año 2009 tras iniciar unas obras de reforma ilegales (no pidió las correspondientes licencias y tuvo que pagar una sanción) que paralizaron el sueño de Gómez de tener la Puerta del Sol más cerca. En concreto, los socialistas pagan a los propietarios de su cuartel general, la Asociación de la Prensa de Madrid, un alquiler de 156.000 euros anuales.
Firmaron un contrato para mantenerse al menos diez años en Callao mientras sobre sus antiguas oficinas en propiedad en Miguel Fleta, en el distrito de San Blas, aún pesan dos hipotecas a las que los socialistas también deben hacer frente. «Es indudable que ahora el partido tiene más visibilidad, pero lo importante no son las oficinas, sino que los dirigentes se muevan. Gómez, desde que llegó a Callao, ha pasado más horas arreglando la organización que buscando votos, así nos va», se quejaba ayer un socialista.