La mujer más valiente por Javier ORS

Las mujeres van rompiendo techos de cristal, que no es otra cosa que una solidificación de machismo y prejuicios, aquellos que se habían heredado de centurias anteriores. Una sociedad demuestra su civilización cuando ellas alcanzan las cumbres de poder, las cúspides que durante siglos les habían regateado, y pueden asentarse en sus cornisas en igualdad de condiciones, mirando de tú a tú a los hombres. La política era un coto privado, un espacio reservado para hombres. Un lugar que cubría su cuota (la palabra lo dice todo) con una suma reducida de perfiles cerrados, duros, como el de la Thatcher.
Según «Newsweek», entre las 150 mujeres más valientes del mundo –también las listas han dejado de ser patrimonio de hombres– se encuentra Soraya Sáenz de Santamaría, que ha sido una política discreta, que ha forjado imagen haciendo mucha profesión desde los escaños de la paciencia, de la voluntad. Y después, desde el ejemplo, con una maternidad que no le ha hecho renunciar a nada, haciendo callar a todos los bocazas que ponen en cuestión de lo que es capaz su género. Rajoy la hizo vicepresidenta y ministra de la Presidencia. Ahora, una revista norteamericana ha asegurado que es la mujer más poderosa de la democracia española. Y es que todavía hay algo que no ha cambiado: que hasta los poderosos necesitan alguien que les diga lo poderosos
que son.