París

Los bancos centrales al rescate

BRUSELAS- La decisión concertada de los principales bancos centrales del mundo permitió ayer a los mercados darse un festín. Las bolsas europeas –a media sesión el Dow Jones también lo celebraba con una espectacular subida– cerraron todas con subidas por encima del 3% y la tensión sobre la deuda soberana de los países europeos se relajó con la única excepción de Portugal. Al final, el Ibex-35 subió un 3,96%, con todos sus valores ganando entre el 1,32% (el que menos, BME) y el 11,40% el que más (Mediaset). La prima de riesgo acabó en 395 puntos básicos, por primera vez en dos semanas por debajo de la barrera de los 400 puntos.> El Ibex 35 sube un 3,96 % tras la acción conjunta de los bancos centrales

Los bancos centrales pactan acciones coordinadas para evitar una crisis de liquidez
Los bancos centrales pactan acciones coordinadas para evitar una crisis de liquidezlarazon

La fiesta tuvo un detonante común para todos los mercados. Sobre las dos de la tarde hora española, el Banco Central Europeo, la Reserva Federal de Estados Unidos, y los bancos centrales de Inglaterra, Japón, Canadá y Suiza acordaron una acción concertada «para incrementar su capacidad de proporcionar liquidez al sistema financiero internacional».

Familias y empresas
Los bancos centrales explicaron que estas medidas pretenden «aliviar las tensiones en los mercados financieros y mitigar sus efectos en el suministro de crédito a los hogares y empresas, y así fomentar la actividad económica». Los seis bancos centrales se han comprometido a ofrecer liquidez en euros, dólares, yenes, libras esterlinas, francos suizos y dólares canadienses. Actualmente no existe ninguna necesidad de liquidez en ninguna de estas monedas con la única excepción del dólar. El Banco Central Europeo va a seguir conduciendo sus operaciones de liquidez en dólares con vencimientos de una semana y tres meses al nuevo precio establecido (medio punto porcentual por debajo del hasta el momento vigentes) y mediante el procedimiento de subasta a tipo de interés fijo. En definitiva, habrá barra libre de dólares.

Aunque la noticia cogió ya a las bolsas europeas en números verdes, el anuncio del acuerdo disparó al alza los índices de todos los mercados europeos. En tan sólo veinte minutos, el Ibex-35 subió cerca de 200 puntos (desde el 8.216,9 al 8.412,8), aunque aún tuvo tiempo de ganar terreno. Al final, el principal indicador de la bolsa española comenzará la sesión de hoy desde los 8.449,5 puntos, un 3,96% por encima del cierre del martes. Pese a todo, el Ibex cierra noviembre con una pérdida mensual del 5,6%.

En Europa, Fráncfort lideró las ganancias, con un repunte del 4,98%, por delante de Milán (+4,38%) y París (+4,22%). En Estados Unidos, Wall Street también subió con fuerza (-4,23%).

Deuda: baja la tensión
Por lo que a los mercados de renta fija se refiere, el acuerdo se celebró con una cierta euforia. El bono español ofreció una rentabilidad al cierre del 6,231%, un 2,54% inferior a la del día anterior. La prima de riesgo, el diferencial que España tiene que pagar para colocar su deuda, que llegó a rozar los 420 puntos básicos, terminó la sesión en los 395 puntos.

La principal preocupación de los inversores sigue centrada en Italia. Aunque el interés de sus bonos a diez años bajó un 2,75%, el país transalpino sigue teniendo que ofrecer precios por encima del 7%, un nivel muy peligroso.

 

El PIB español caerá entre el 1% y el 1,9%
Los analistas extranjeros pintan, cada día que pasa, más nubarrones en el horizonte económico español. Ayer, el banco estadounidense Citigroup vaticinó que el PIB de España caerá un 1,9% en 2012 y otro 0,8% en 2013, como consecuencia de la recesión de la zona euro y el impacto de un próximo ajuste fiscal sobre el consumo y el gasto público.

Sólo un poco más optimistas fueron las previsiones de Merrill Lynch, que redujo la caída de la economía española el año próximo a un 1%, aclarando que lo peor está por llegar. Aunque sus expertos advierten de que «no hay que ser catastrofistas», aseguraron que Italia está mejor que España, que deberá reestructurar el sector financiero.