España responde con más éxitos

Madrid- Los guiñoles franceses tienen mucho trabajo por delante si pretenden seguir desacreditando los éxitos deportivos de sus vecinos, porque los atletas españoles se han empeñado en que a los guionistas de Canal+ Francia no les falten ideas ni personajes para sus vídeos. Mientras el asunto se calentaba hasta límites insospechados y traspasaba el ámbito deportivo para pasar al político, las estrellas españolas no han hecho otra cosa que continuar haciendo historia. «Cree el ladrón que todos son de su condición. A seguir triunfando en todo con nuestra pócima: trabajo, trabajo y trabajo», decía en Twitter José Manuel Calderón, base de los Raptors, poco después de que Marc Gasol rompiera una barrera más en la NBA. El pívot se convertía ayer en el segundo jugador nacido en España elegido para disputar el Partido de las Estrellas, una respuesta contundente e inmediata a las burlas galas. El hermano de Pau compartirá vestuario en el equipo de la Conferencia Oeste con Tony Parker, el capitán de la selección francesa y que se supone que habrá tomado los mismos productos prohibidos que Marc para captar los votos de los 30 entrenadores de la Liga.

Esta misma noche, «La Roja» de fútbol-sala tiene otra oportunidad para engrandecer la década dorada del deporte nacional con un nuevo título, ya que disputa ante Rusia la final del Campeonato de Europa. Podría ser la sexta corona continental para España en siete ediciones, así que los guiñoles podrían elucubrar sobre las «extrañas» razones de este dominio, teniendo en cuenta que Francia ni siquiera ha participado. «Es pura envidia, lo que sucede es que escuecen nuestros éxitos», apuntaba Duda, técnico de ElPozo Murcia, respecto a una polémica que desde el Gobierno quieren dejar atrás. «Nosotros consideramos el asunto como zanjado. Se trata de algo localizado y de una desafortunadísima intervención de una empresa privada a través de un programa de televisión», aseguró José Ignacio Wert. El ministro de Educación, Cultura y Deporte suavizó bastante sus declaraciones de los días previos, mientras la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, hacía público el apoyo del Gobierno al limpio trabajo de sus deportistas: «En España se cumple la normativa antidopaje y es intención de este Ejecutivo reforzar dicha ley en la medida de lo posible. Desde el Gobierno vamos a defender la autenticidad de los logros de nuestros atletas», insistía Santamaría, expresando el mismo mensaje de «tolerancia cero» con los tramposos que mantiene Alejandro Blanco, presidente del COE, y todos los dirigentes deportivos. «Si se analizan las condenas por este tipo de conductas, estamos muy por debajo de la media». Los datos de porcentaje de positivos respecto al número de controles dan la razón a los que consideran que este país nunca fue un paraíso para los tramposos, y el siguiente objetivo es evitar la sombra de sospecha que todavía queda desde el exterior. Las fallidas operaciones «Puerto» y «Galgo» no han ayudado a exportar la mejor imagen, pero los esfuerzos van encaminados a que esta sensación desaparezca y no perjudique a una generación irrepetible.

«Son gente que se lo gana a pulso; muchos de ellos son un ejemplo de superación y de defensa de su país por donde van. Ayudan a hacer eso que se llama "marca España", y nos sentimos orgullosos», concluyó Santamaría tras anunciar que Mariano Rajoy y el Rey Don Juan Carlos recibirán el martes a los jugadores que consiguieron la Copa Davis ante Argentina. Precisamente ayer, España comenzó la defensa de este título sin los héroes de Sevilla. Nadal y Ferrer dejaron su lugar a Ferrero y Almagro, que en la primera jornada pusieron a Kazajistán a un paso de la eliminación. Además, Pau Gasol colocó un sensacional tapón en el último segundo para que los Lakers ganaran a los Celtics en el Garden. Como se enteren los guiñoles...