El IVA envenenado por Ángel del Río

De todas las medidas anunciadas por Rajoy, la que mayor ampollas ha levantado ha sido la subida del IVA, que es ese impuesto que envenena los presupuestos domésticos y los de las administraciones. El presidente de los hoteleros madrileños ha llamado torpe al Gobierno «porque no ha sabido defender ante la UE una medida que es decisiva para el turismo y los hoteles». En estos tiempos difíciles, en los que a pesar de todo el turismo sigue siendo la gallina de los huevos de oro, corremos el riesgo de echarlo todo a perder, de que la gallina ponedora se quede estéril. Las asociaciones de consumidores también se unen a esa cruzada contra la subida de la madre de todos los impuestos. A la presidenta regional, Esperanza Aguirre, le parecen acertadas las medidas de Rajoy, menos la subida del IVA, y reitera que ella está dispuesta a mantener el compromiso adquirido con los madrileños de no subir la presión fiscal. ¡Más madera!

La Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid hacen encajes de bolillos para que les encaje la subida del IVA. Ajuste sobre ajuste y sobre ajustes uno…uno más. Lo que el Ayuntamiento se ahorra por la supresión de la paga navideña a los funcionarios, se le va en la subida del impuesto en las facturas de las contrataciones. Algo parecido ocurre en la Comunidad. Ser concejal o consejero de Economía en tiempo de crisis, no se lo deseo al peor de mis enemigos. Es una forma de volverse loco, sobre todo si las medidas se van ejecutando en dosis que alteran el tratamiento contra la depresión económica, como si en vez de administrar ansiolíticos, recetaran excitantes.