Terrorismo
«Temo que otro como mi hijo sea asesinado por ese criminal»
Muerden la rabia y el dolor. Las víctimas del ex integrante del «comando Madrid», Antonio Troitiño aún no acaban de creer que el asesino de sus hijos, padres y hermanos esté en libertad. Muchos ven en esta decisión «razones políticas» y destacan que el Gobierno quiere «apuntarse un tanto» y presumir de que consiguió acabar con ETA. Todos piden «que cumpla íntegramente su pena y vuelva a prisión».
Jesús Fausa conducía el Land Rover de la Guardia Civil aquel 25 de abril de 1986. Fue el último que vio con vida a Alberto, Juan José, Vicente, Juan Carlos y Mateo. En el momento de la explosión, al pasar por Juan Bravo «fue como si empezara a soñar», cuenta. Cinco de los nueve guardias civiles que viajaban en el vehículo, murieron. Fausa no ha podido borrar de su recuerdo cómo uno de esos «chavales» que trasladaba hasta las embajadas se le quedó muerto a sus pies. «¡Empezaban a vivir!».
«Pulido era muy majo, muy tranquilo, decía las cosas con mucha serenidad». «Catón venía a veces con una capa y bromeábamos con él: "Pareces sacado del Quijote, así eres idéntico a Cervantes». Y Catón sonreía. «A Domínguez le recogí ese día el primero, pero tenía que haberle recogido al final y Alberto era encantador». «Con la ilusión que tenían todos..., ¡tenían que estar vivos!». Fausa cree que «se está jugando con la muerte de esos chavales e indignado no quiere ni pensar qué haría si se le cruzara por la calle. «Ese individuo ha estado 23 años comiendo, riendo, bailando, viviendo... y esos chavales murieron».
Hortensia Gómez se dio cuenta ayer, leyendo la sentencia del juicio, de que Troitiño era uno de los asesinos de su hijo. «Si hay que pagar un abogado para que vuelva a la cárcel, lo pago. Voy a llamar al Ministerio del Interior para exigirle a Rubalcaba que este criminal vuelva a prisión». «Yo con mi edad ya no tengo miedo a nada, y si hace falta me presento en el Ministerio». Gómez está convencida de que este «asesino volverá a matar. «Temo que otro como mi hijo sea asesinado por ese criminal».
Santiago Busque sobrevivió al atentado de República Dominicana y exige «que los terroristas cumplan íntegramente las penas, no las penas que quieran los políticos». «Me da miedo cruzármelo o que venga a pegarme un tiro» porque cree que «volverá a intentarlo». Manuel Lancharro recuerda la ilusión de su hermano, que se acababa de comprar un coche, y solía recoger a dos compañeros camino a Madrid. «Semejante monstruo para el que la vida no tiene valor, no puede estar en libertad».
✕
Accede a tu cuenta para comentar