Cataluña

La Fiesta es Cultura

Eran las cinco en punto de la tarde cuando el Gobierno de Sarkozy decidió inscribir la Fiesta de los toros como Patrimonio Cultural Inmaterial. Podía haber coincidido la hora en homenaje a esa obra de arte «Llanto por Ignacio Sánchez Mejía», de García Lorca. Nadie, sin vinculaciones extremistas, puede entender que Francia haya tomado el estandarte de la defensa de un arte.

La Razón
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Los toros no sólo están entroncados con la Cultura, sino que, como la Cultura, traspasa fronteras. Sarkozy ha dejado en pelota picada al Gobierno de Zapatero, que, como el avestruz, esconde la cabeza debajo de su ala y así no existe el problema, y ha desvelado la irracionalidad de la prohibición en Cataluña, donde los nacionalistas se guiaron por su condición de Fiesta Española. Lorca, Heminway, Benlliure, Goya, López Azuán y un sinfín de escritores, músicos, pintores, escultores…se inspiraron en el toro para obras geniales e imperecederas. La Fiesta es Cultura. Lo declaraba el maestro José M. Arroyo «Joselito» : «Independientemente del Ministerio que dependa. Aunque fuera del Ministerio del Aire, los toros seguirían siendo cultura». Para ser justos, no ha sido Francia la primera en dar la condición de Patrimonio Cultural Inmaterial. Como nación sí. Para eso está ZP. Las Comunidades Valenciana y de Madrid, presididas por los populares Camps y Aguirre, ya iniciaron en 2010 los expedientes para elevar la Fiesta a «Bien de Interés Cultural». Impresiona que el Gobierno de Andalucía, cuna principal de matadores y ganaderías, permanezca de brazos cruzados. Así es la vida.