Lisboa

El Gobierno se lava de nuevo las manos y pide a EE UU que medie en el conflicto

La ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez, se estrenó ayer en su primera cumbre de la OTAN con un «cara a cara» con la secretaria de Estado de EE UU, Hillary Clinton, en el que ambas hablaron de la «preocupante» situación en el Sáhara

Zapatero, en la rueda de prensa posterior a la cumbre de la OTAN
Zapatero, en la rueda de prensa posterior a la cumbre de la OTANlarazon

Aunque no estaba en la agenda, «Trini» propuso a Clinton dar un «impulso político» al Grupo de Amigos del Sáhara que integran en la ONU España, Francia, Reino Unido, Rusia y EE UU para que tenga más «protagonismo» en las negociaciones entre el Polisario y Marruecos, que siguen sin dar frutos.

La jefa de la Diplomacia española no quiso decir cuál había sido la respuesta americana, aunque Clinton le aseguró que lo «estudiaría» y que le había parecido «importante». España apuesta por ampliar las competencias de la misión de Naciones Unidas para el Sáhara Occidental (Minurso) para que vigile «la protección de los derechos humanos».

El Gobierno sigue a la espera de un informe independiente de ONG y organismos internacionales para saber qué ha ocurrido en El Aaiún. «Trini» se mostró encantada con un encuentro que duró poco más de media hora. Así, gritó a los cuatro vientos la buena relación que hay entre España y EEUU, Zapatero y Obama. Y lo hizo con toda idea y con un objetivo muy claro: soltar el «marrón» del Sáhara a sus amigos de EE UU.

Sin temblarle la voz, «Trini» le pidió a Hillary que tomase la iniciativa para solucionar el conflicto, algo que el Gobierno español ha evitado hacer desde el principio. Sin embargo, pese a la euforia de «Trini», Hillary se limitó a decir que «lo pensaría».


Zapatero lo ve «dificilísimo»
- Zapatero reconoció ayer que un acuerdo entre Marruecos y el Frente Polisario sobre el Sáhara es «dificilísimo», al tiempo que pidió a Naciones Unidas que lidere el proceso para encontrar una solución. En rueda de prensa tras participar en la Cumbre de la OTAN celebrada en Lisboa, Zapatero insistió en que «lo que necesitamos es una acuerdo político permanente» en el que se trabaja desde hace años «pero que no hemos conseguido». No obstante reiteró que «es un esfuerzo que debe liderar Naciones Unidas», no España.