Anita Ekberg: «Estoy un poco sola pero no lo lamento»

"Estoy un poco sola, pero no lo lamento. Amé, lloré, enloquecí de felicidad. He vencido y he perdido", afirmó la actriz, de 79 años, en una entrevista en el periódico italiano "Il Corriere della Sera".

La que fuera una de las rubias más sensuales de la época, está contenta porque las monjas que administran el hospital le han prometido prepararle "una buena comida para su cumpleaños".
Ekberg recordó cómo a Fellini le encantaba su "forma de caminar" y cómo, durante el rodaje de la película que la lanzó a la fama, "paseó por la Fontana de Trevi de arriba a abajo, sin tropezar jamás".

Para la intérprete, "La dolce vita"no era un gran film: "Sólo existe por esa escena enloquecedora en la que estábamos Marcello (Mastroianni, el protagonista masculino de la película) y yo. Más yo, en verdad, que él", subrayó. "Fellini era un genio absoluto, nunca entendí cuál fue el motivo real que le impulsó a escogerme como protagonista de 'La dolce vita'. Leía en el corazón de los intérpretes y los dirigía como si fueran mariposas", sostuvo la actriz.

Anita Ekberg repasó también su vida sentimental, especialmente su "secreto bellísimo"con el industrial Gianni Agnelli, propietario del grupo automovilístico Fiat, pero admitió que no le gustaba "hacer un elenco de las propuestas de matrimonio recibidas". Ekberg, icono sensual de los 60 gracias a la película de Fellini, estuvo casada dos veces, con el actor inglés Anthony Steel, entre 1956 y 1959, y con el intérprete estadounidense Rick Van Nutter de 1963 a 1975. Recibió también propuestas del director Dini Risi, que siempre rechazó: "Risi hubiese querido tener algo conmigo, y nunca hubo nada. Fue muy insistente", aseguró.
"Fui bellísima, lo sé", zanjó.