Discurso de Navidad
De los deberes de Mohamed VI al politono del Rey
El saharaui Ahmed Ould Souilem presentó ayer al Rey en el Palacio Real las cartas credenciales como nuevo embajador de Marruecos en España, un puesto que estaba vacante desde hace un año.
El representante marroquí fue nombrado embajador por Mohamed VI el 26 de noviembre, una semana antes de que Rabat anunciara su decisión de revisar el conjunto de la relación con España en protesta por la moción aprobada en el Congreso de condena por la violencia en El Aaiún.
En la primera reunión mantenida entre Don Juan Carlos y el marroquí, el Rey se interesó por Mohamed VI, que pretende abrir una nueva etapa tras un año crítico. Ould Souilem, que llegó el sábado con su familia, nació en 1951 en Dajla, denominada Villa Cisneros cuando España administraba la que fue su colonia hasta 1975. Fue miembro del Frente Polisario hasta julio de 2009, cuando abandonó sus filas para apoyar el plan de autonomía para el Sáhara.
La risa de un bebé
La anécdota de la jornada estuvo protagonizada por el Rey y los medios de comunicación fueron testigos de la divertida escena. El teléfono móvil de Don Juan Carlos comenzó a sonar justo cuando se dirigía al primer cara a cara con el embajador marroquí. Aunque el Monarca se apresuró a desactivarlo con visible turbación, los asistentes pudieron percibir que el tono es una entrañable risa de bebé. En el acto también estuvo presente Trinidad Jiménez, que aún no ha visitado Marruecos.
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