Lars Von Trier muestra su sabiduría en Sitges con «Melancolía»

Las dos películas presentadas ayer a concurso en la sección Panorama Fantástico son la cara y la cruz. Por una parte, se proyectó una maravillosa producción que roza la magnificencia: se trata de la nueva de Lars von Trier, «Melancolía». Un planeta así denominado puede chocar con la Tierra. Mientras, una mujer, Claire, se casa. La fiesta de esta boda constituye la trama de la cinta. Ella es una persona extraña, y aquí está la clave de la historia: el planeta se llama melancolía, y ella sufre de tristeza, ese dolor imparable que hace romántico un amor despreciado. Los personajes, angustiados, despóticos, hipócritas o cansados, crean un microcosmos que gira alrededor de dos mujeres que se enfrentan al fin del mundo. En definitiva, una cinta sabia, perfecta y grande.

De la cisma al abismo
La cruz de esta moneda, y que conste que lo digo con pena, es «Twixt», de Coppola. Un director que llegó a la cima de su arte y que dio al cine varias obras maestras da lástima que haya caído y de forma tan torpe, tan abajo. Por otra parte, se proyectó «Emergo», de Carles Torres, sobre la investigación de sucesos paranormales que empieza bien pero se acaba torciendo.